Prudencia y responsabilidad en el presupuesto para 2012 (El Financiero 12/09/11) Jeanette Leyva Reus / Víctor Felipe Piz Lunes, 12 de septiembre de 2011 •Proyecciones realistas, sólidas y consensuadas: González Anaya. •Descartada, inyección de gasto federal en el año electoral. •Posición de relativa fortaleza en este entorno incierto.
· Prudente, el paquete económico: Hacienda
El proyecto de presupuesto federal para 2012 es prudente y responsable, pues contiene proyecciones realistas, sólidas y consensuadas. Podríamos hacer proyecciones más optimistas, pero no serían realistas, dada la falta de certidumbre en las principales economías del mundo, afirma el subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), José Antonio González Anaya. En entrevista con EL FINANCIERO, asevera que estamos enfrentando este entorno incierto y de inestabilidad internacional desde una posición de relativa fortaleza, porque tenemos finanzas públicas sanas. Además, estamos tomando las medidas necesarias para anclar de la mejor manera posible las variables económicas, comenta desde su despacho en Palacio Nacional. La previsión de un crecimiento de 3.5 por ciento en 2012 está en línea con lo que todo mundo piensa; tiene un precio del petróleo de acuerdo con la fórmula, de casi 85 dólares por barril, y una plataforma de producción constante como el año pasado, de dos millones 550 mil barriles. González Anaya expone que el déficit público se reduce de 0.5 a 0.2 por ciento del PIB, pero no se elimina; eso quiere decir que se sigue manteniendo el impulso contracíclico. El funcionario responsable de la política fiscal del país dice esperar que el paquete económico de 2012 se discuta en el Senado y la Cámara de Diputados con toda responsabilidad y seriedad como se ha hecho antes. Subraya que la administración del presidente Felipe Calderón está trabajando para entregar las mejores cuentas posibles a su sucesor. "Hay que ocuparse todo el año para dejar de preocuparse después." Sin miscelánea fiscal El presupuesto pone por delante la prudencia y la responsabilidad en lugar de sucumbir a una inyección de gasto federal en un año electoral. No estamos proponiendo un presupuesto alto para que haya más ingresos, ni estamos moviendo la variable del petróleo; es un presupuesto basado en crecimiento y proyecciones realistas, reitera. El país necesita más, no hay duda, pero si hemos resistido a la tentación de caer en la indisciplina fiscal, "éste es el peor momento para arriesgar la estabilidad", enfatiza González Anaya. Admite que el reto es reducir la dependencia de los ingresos petroleros, aunque recuerda que en esta administración los ingresos tributarios han aumentado de una manera importante, en un punto del PIB. "Eso no se hacía desde hace mucho, y también el número de contribuyentes ha aumentado a más de 35 millones; eso es eficiencia tributaria y fiscalización, porque la ley es la misma", justifica. Gracias a esas acciones, por tercera vez en esta administración "mandamos al Congreso un presupuesto sin miscelánea fiscal", pues no hay cambios en las tasas impositivas. Más bien, "vamos a introducir una serie de cambios en el Código Fiscal de la Federación para simplificar los comprobantes fiscales de 158 a 26 requisitos". Además, "estamos reduciendo 140 cuotas en la Ley Federal de Derechos que, sumado a los cambios que hicimos el año pasado, es el programa de desregulación de derechos más importante que se ha hecho en mucho tiempo". Mensaje de tranquilidad González Anaya sostiene que los mexicanos deben estar tranquilos de lo que está haciendo la SHCP, pues aunque en Europa quiebren los bancos y en Estados Unidos están sufriendo por la debilidad de su economía, en México se puede enviar un mensaje de tranquilidad: "Estamos enfrentando este entorno incierto y de inestabilidad desde una posición de relativa fortaleza, porque tenemos finanzas públicas sanas y estamos comprometidos con la disciplina fiscal, como lo propone el paquete económico. "Tenemos las reservas internacionales más altas de la historia, pues hace 15 o 20 años, en el cambio de gobierno de 1988 a 1989 eran como de dos mil millones de dólares y hoy están sobre 133 mil millones. "Además está la línea de crédito flexible con el FMI, lo que nos da cerca de 200 mil millones de dólares; el déficit de cuenta corriente es de un punto y pico del PIB; las cuentas externas están bien balanceadas, y no hay presiones de vencimientos de deuda el próximo año." Insiste que "el entorno de finanzas públicas se ve sólido, lo mismo que el de las cuentas con el exterior; tenemos un sistema bancario bien capitalizado, por lo que estamos entrando a estas aguas turbulentas desde una posición de relativa fortaleza". Sobre el paquete económico para 2012, el subsecretario de Ingresos plantea que se tiene que maximizar el efecto contracíclico del presupuesto. Concede que la parte de ingresos es compatible con los egresos La proyección de ingresos, más la parte de financiamiento, que es moderada, nos da un crecimiento en el presupuesto de 4.4 por ciento en términos reales. "¿Cuáles son los ejes?", pregunta para luego responder: "el primero es seguridad, y todos debemos estar de acuerdo que es una prioridad, por eso propone un incremento de 11 por ciento y llega a 147 mil millones de pesos, esto refleja el compromiso del presidente Calderón con el tema". El segundo es el fomento al mercado interno a través de los programas de infraestructura, de apoyos a las Pymes y a la vivienda. El tercero es política social, en donde va hasta adelante salud con el Seguro Popular; también viene educación, que tiene incrementos importantes, y el programa de becas de capacitación.
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