Señalan vulnerabilidad del peso (Reforma 23/09/11)
En México, el tipo de cambio reaccionó como lo hizo en marzo del 2009, señaló el especialista. Foto: Archivo
Se prevé que la moneda nacional regrese a un nivel de 13.50 en los próximos días Ernesto Sarabia Ciudad de México (23 septiembre 2011).- La depreciación sufrida por la moneda mexicana en los últimos días demuestra que en un mundo globalizado no hay moneda que aguante a los embates del exterior, a pesar de todos los blindajes financieros, aseguró Alfredo Coutiño, director para América Latina Moody's Analytics. Ante la ola de pánico global desatada por la presencia de más nubarrones en la economía mundial y la estampida de los inversionistas por refugiarse en el menos peor de los lugares (Estados Unidos), el peso mexicano volvió a las andadas, al depreciarse significativamente y rebasar la paridad de los 14 unidades por dólar. "La realidad volvió a demostrar que en un mundo globalizado no hay moneda que no sucumba a los embates del exterior, a pesar de todos los blindajes financieros", dijo. La reacción cambiaria fue un evento mundial ocasionado por el pánico global ante el creciente riesgo de que la recuperación en el mundo esté en el umbral de una nueva recesión. La reacción de los mercados fue prácticamente similar a la ocurrida en 2008, al inicio de las quiebras bancarias en los Estados Unidos. En México, el tipo de cambio reaccionó como lo hizo en marzo de 2009 ante el empeoramiento de las condiciones financieras y económicas a nivel mundial. En aquel entonces el tipo de cambio alcanzó 15 pesos por dólar. En esta ocasión, como en marzo de 2009, la reacción cambiaria tiene un fuerte componente sicológico generado por el pánico global ante el regreso de una recesión combinada con el agravamiento de los problemas financieros en Europa. Por ello, es de esperase que la paridad regrese a niveles más cercanos a los 13.50 en los próximos días. Sin embargo, a pesar de la sobrerreacción cambiaria, también es necesario reconocer que existe un componente de corrección en el tipo de cambio que deriva del debilitamiento económico del País y de su alta exposición a la caída en el ciclo económico estadounidense. En este contexto, para Coutiño, no será posible volver a ver una paridad menor a 13 pesos en lo que resta del año, situación que lejos de considerarse como un mal, debiera ser un factor positivo de competitividad para el sector exportador ante la inminente caída de la demanda externa. Incluso, alertó, de empeorar las condiciones externas no debería ser una sorpresa volver a ver un tipo de cambio de 15 unidades por dólar en algún momento, aunque sea de manera transitoria.
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