Se pierde 16% del suministro en canales de distribución (El Financiero 29/09/10) Esther Arzate Miércoles, 29 de septiembre de 2010 Prevé BM ahorro de 6% en 20 años. Sugieren mejorar oferta y demanda. Aumentan proyectos de eficiencia: Cox. El 16 por ciento de la energía que se produce en América Latina y el Caribe se pierde en las redes de distribución, lo que equivale al consumo total de electricidad de Argentina, Chile y Colombia, informó la vicepresidenta de esa región del Banco Mundial (BM), Pamela Cox. La ejecutiva señaló que las pérdidas son "un dato abrumador" que puede reducirse y significaría grandes ahorros para el Estado, la sociedad y un beneficio para el medio ambiente. Si dichas pérdidas de energía se pudieran reducir en un periodo de 20 años, los ahorros evitarían un 6 por ciento de la generación de electricidad adicional en dos décadas, estimó. Ésta, dijo, es una oportunidad única y tiene un doble beneficio, ya que reduce los requerimientos de inversión en generación y tiene un menor impacto en el medio ambiente. En el Foro de Eficiencia Energética y Acceso organizado por las secretarías de Energía y Relaciones Exteriores, la representante del BM dijo que reducir las pérdidas en las líneas de distribución corresponden a acciones de eficiencia en la oferta, pero también existen oportunidades de aumentar la eficiencia energética en la demanda. Ello, expuso, a través de programas de sustitución de focos incandescentes y electrodomésticos ineficientes por lámparas fluorescentes compactas. También se puede mejorar la oferta energética en el transporte mediante el uso de gas natural o etanol en sustitución de gasolina tradicional, como ya sucede en países como Brasil. Por otro lado, se refirió a la eficiencia energética como un papel de primer orden para satisfacer la demanda energética, pero criticó que enfrenta barreras técnicas, institucionales, normativas y financieras. Para poder realizar los programas de eficiencia energética de forma rápida y en mayor escala, es necesario superar varias imperfecciones y obstáculos, como los altos costos iniciales de las inversiones y barreras institucionales para la implantación de programas. La desinformación por parte de los financiadores es también una realidad, ya que no es práctica común que la banca comercial otorgue créditos para inversiones que se repaguen a partir del ahorro de energía, expresó. Destacó que en los últimos años la cartera de proyectos de eficiencia energética del BM se expandió a más de 360 proyectos en cerca de 90 países y en el último año fiscal invirtió tres mil millones de dólares. Se puede observar, por ejemplo, que el financiamiento por sí solo no genera cambios sistémicos, ya que se requieren marcos institucionales apropiados y una adecuada gobernabilidad. También es importante el establecimiento de mercados con bases sólidas, un sistema regulatorio favorable para la promoción de una mayor eficiencia en los negocios y trabajar mano a mano con el sector privado. La innovación de tecnología y un adecuado modelo de negocios, así como financiamiento, son también necesarios. El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan Rafael Elvira, aseguró que necesitan escuchar del sector privado las necesidades que tienen de lograr mejores niveles de eficiencia energética, y dijo que el gobierno federal está enfocado a programas para mejorar la eficiencia en el sector transporte, vivienda y generación y distribución de electricidad.
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