Escalan precios de los alimentos (Reforma 29/07/11)
Pilar, dueña de un puesto en el Mercado de La Bola, asegura que ante la carestía del aguacate sus clientes prefieren llevarse una pieza. Foto: Daniela Rea
Estima el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas incierto el abasto de granos y verduras por daño a cultivos Daniela Rea Ciudad de México (29 julio 2011).- Desde finales del 2007, el precio de los alimentos en México ha registrado un incremento constante. De acuerdo con datos del Banco de México y del Inegi, el aumento acumulado en los últimos tres años y medio asciende a 22.3 por ciento. El valor de productos de consumo básico, según un análisis del Observatorio de Política Social y Derechos Humanos, ha crecido a un ritmo más acelerado que el de la inflación general. La mayor diferencia se registró en 2008, cuando la inflación alcanzó 6.5 por ciento y el incremento en el precio de los alimentos 10.2. Según el Índice de Precios al Consumidor, dado a conocer por el Inegi el viernes pasado, la inflación para alimentos en la primera quincena de este mes fue de 0.2 por ciento, superior a la que registraron ropa, calzado, vivienda, salud, transporte, educación y electrónicos. El precio de las frutas y verduras registró un incremento de 4.24 por ciento. El tomate verde tuvo una variación porcentual de 36.5 por ciento, la cebolla de 20, el aguacate de 14.1, la calabacita de 11 y los chiles frescos de 8. El pollo tuvo una variación de 1.9 por ciento y el huevo, 1.2. El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados advirtió que el precio de los alimentos podría mantener su tendencia a la alza en el mediano plazo en México, pues se prevé para el resto de este año una reducción de 5 por ciento en la producción de maíz, de 9 por ciento para la de sorgo y de 8 por ciento para otros granos, debido al retraso de lluvias y a la disminución de áreas de cultivo. "En el ámbito nacional, los precios de algunos productos de consumo básico retomaron su tendencia alcista y podrían mantenerse en esos niveles si continúa la incertidumbre de abasto ante la posibilidad de una reducida oferta por la menor superficie de siembra y las mayores mermas en cosechas, luego de las situaciones extremas de clima. "Con ello, el abasto de productos básicos en el mercado nacional es incierto, lo que explica el aumento de los precios al mayoreo de algunos alimentos, granos y oleaginosas de granos", indica en el Análisis Mensual de Productos Básicos correspondiente a junio. El incremento acumulado en el precio de los alimentos, sostiene el Observatorio de Política Social, impacta mayormente a las familias más pobres del País. Los resultados de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares (ENIGH) 2010, recuerda, indican que 10 por ciento de los más pobres dedican a ese rubro la mitad los 480 pesos mensuales de su ingreso, y no alcanzan siquiera a pagar una canasta básica, con costo de 780 pesos mensuales en las zonas rurales. "El Estado mexicano no ha priorizado la estabilización de los precios de los alimentos, la consecuencia es que los sectores más pobres son los más afectados, pues son éstos los que destinan una mayor proporción de sus ingresos en adquirir los bienes básicos de alimentación", señaló en entrevista Ricardo Sanginés Contreras, investigador del organismo. "Las políticas macro económicas están lejos de contribuir a mejorar las condiciones de vida de los más pobres. Al menos no lo está siendo en el acceso al derecho a la alimentación", agregó. 'Desde la crisis, no nos reponemos' En el puesto de aguacates hay un letrero que anuncia el precio: 70 pesos el kilo. Junto, hay otro más pequeño en el que se lee "5 pesos por verlo". Pilar y Pablo acomodan las verduras de su puesto en el Mercado de la Bola y una mujer se acerca a comprar. Un aguacate le sale en 15 pesos. "Ya ni la friegan, está más caro que el bistec", rezonga, pero igual se lo lleva. Hace unos meses le hubiera alcanzado para medio kilo. Los propietarios del puesto compraban antes cajas enteras de aguacate. Ahora van por piezas para sacar el día. "Desde que fue la crisis no nos reponemos", comenta Pablo. "El jitomate, por ejemplo, hace unos tres años estaba a 7, 8 pesos el kilo. Ahora difícilmente baja de 10 pesos. Y así con todo. Sube y baja según el clima o la producción, pero ya no está como antes, ya no se recupera el precio que tenía. Lo mismo con la tortilla, ¿cuándo la encuentras debajo de los 10 pesos?". El comerciante sospecha del clima, del gobierno, de los narcos para explicarse que un kilo de aguacate sea inaccesible para la mayoría, a pesar de que México es el principal productor mundial. "El rumor dice que La Familia Michoacana controla los sembradíos y deben pagar una cuota para sacar el aguacate o el limón, como pasó hace un año, que no salía, que hubo carestía", señala. Otro puestero coincide en que la escalada de precios no parece tener fin. "No se ha compuesto la situación, pero a todo se acostumbra uno", suelta el hombre que desde hace dos meses sacó al aguacate de su oferta. No se le vaya a quedar. Los vendedores de frutas y verduras señalan que al menos tienen comida para llevar a sus casas. Pero las ventas han caído un 30 por ciento desde el 2008 y no se reponen. La gente compra menos, varios clientes se van a los supermercados que compiten de manera desleal, acusan, y las cosas suben de precio. "Si antes eramos clase media media, ahora somos media tirándole a la baja. Sacamos para comer, para los estudios de los hijos, para la casa, pero ya no para los viajes o para la ropa. Ya no nos sobra a la quincena", lamenta Pilar.
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