Lucha AL contra depreciación cambiaria (Reforma 28/05/12)
El real de Brasil presenta una caída de 15 por ciento desde su máximo alcanzado en febrero pasado
Por Reuters
Nueva York Estados Unidos (28 mayo 2012).- La guerra cambiaria global que denunciaba Brasil hace poco más de un año ha dado un giro de 180 grados en las últimas semanas en América Latina, que ahora lucha por evitar que sus monedas sean arrastradas por la ola de aversión al riesgo bajo un escenario externo marcado por la crisis europea. Esta semana, las monedas de América Latina seguirían bajo presión, luego de dejar atrás una semana en la que el real brasileño operó sobre la marca de 2 unidades por dólar y el peso mexicano se depreció hasta superar las 14 unidades por primera vez en el año. La evolución de la crisis en Grecia y los datos económicos en Estados Unidos, especialmente el informe sobre la creación de empleo, ayudarán a marcar el tono de las monedas esta semana. "Todas las divisas latinoamericanas claramente se han debilitado. Creemos que esta situación debería mantenerse en el corto plazo en línea con la debilidad global del euro", dijo Sergio Tricio, analista de Forex Chile. Este debilitamiento de las monedas, que llevó a varios bancos centrales regionales a gastar millones de dólares con intervenciones en los mercados durante la última semana, refleja el cambio de escenario desde que el Ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega, acuñó la expresión "guerra cambiaria" a fines del 2010. Ahora, el enemigo de esta proclamada guerra ya no es la avalancha de dólares sino el negativo entorno económico externo, marcado por la crisis europea y los débiles ritmos de crecimiento en dos socios comerciales clave de América Latina, China y Estados Unidos. El objetivo tampoco es, como antes, contener el alza de las monedas, sino evitar una depreciación demasiado rápida. Tras meses de tomar medidas para quitar fuerza a sus monedas, esta caída puede ser considerada un respiro bienvenido por varios bancos centrales de la región. Sin embargo, estas entidades, desde México hasta Brasil, han dejado en claro al mercado que cuentan con herramientas para controlar cualquier volatilidad. "Vemos los principales cambios en el peso mexicano y en el real brasileño, que se han debilitado en una proporción mayor que las monedas de Chile, Colombia y Perú. Y esto se debe en gran medida a lo que pasa con cada una de esas economías, en estos últimos tres países hay presiones inflacionarias y por ende hay menos posibilidad de bajar tasas", dijo Tricio. En México, el peso acumula una depreciación cercana al 8 por ciento en lo que va del segundo trimestre. "Los agentes en la economía percibirían que la debilidad del peso se está volviendo más persistente", dijo el economista de UBS, Rafael de la Fuente, en un informe, donde alertó por el impacto inflacionario que podría tener esta depreciación. Consciente de esto, el Banco de México vendió dólares el miércoles en el mercado por primera vez en casi dos años y medio, luego de que el peso rompiera la barrera de las 14 unidades por dólar debido a los temores por la posible salida de Grecia del euro. Brasil no quiso quedarse atrás y a lo largo de la semana pasada realizó sucesivas ventas de swaps cambiarios, que equivalen a vender dólares en el mercado, después de que el real coqueteara con la marca de 2.10 unidades y acumulara un descenso de casi un 15 por ciento desde un máximo alcanzado a fines de febrero. La ola de aversión al riesgo también se sintió en otras monedas de la región, como el peso chileno y el sol peruano. Y esta semana no sería diferente. Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo Fecha de publicación: 28 mayo 2012
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