Terminó el rebote del PIB para México (El Financiero 12/08/10)

(Viridiana Mendoza Escamilla)

Jueves, 12 de agosto de 2010

.

Alfredo Coutiño. (Foto: Archivo)

El tercer trimestre de 2010 marcará el inicio de una desaceleración en el ritmo de crecimiento de la economía.

En un comentario especial, Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody's Economy.com, explica que a partir del tercer trimestre, el crecimiento empezará un proceso de moderación, debido a que el efecto positivo de la base de comparación desaparecerá y a que la desaceleración estadounidense reducirá el ritmo de las exportaciones mexicanas.

De acuerdo con el analista, la economía mexicana alcanzó su máxima velocidad en el segundo trimestre, al reportar un crecimiento de más del doble de su capacidad potencial.

Este crecimiento inusual se explica porque la expansión industrial continúa liderando la recuperación, particularmente de las manufacturas nacionales altamente ligadas al comercio con Estados Unidos, mientras que el repunte del mercado interno fue más lento.

"La demanda estadounidense por productos del sector automotriz se convirtió en el detonador principal de la industria manufacturera mexicana durante la primera mitad del año.

"Esa expansión industrial, fuertemente influenciada por la demanda estadounidense, ha contribuido a que el PIB del segundo trimestre haya alcanzado la tasa de crecimiento más alta desde la crisis del peso en 1995."

Otro factor que benefició al avance es la influencia del efecto aritmético de la baja base de comparación del año pasado, cuando la economía estaba en recesión.

"Es de esperarse que el crecimiento empiece a desacelerarse a partir del tercer trimestre, a medida que el efecto aritmético positivo tienda a desaparecer, dada la normalización de los volúmenes de producción de la segunda mitad del año pasado", advierte.

Aun cuando se espera que la economía reporte un crecimiento cercano a 5 por ciento al cierre de 2010, Coutiño advierte que la economía continuará estando influenciada por el desempeño económico estadounidense y por el avance gradual del mercado interno, en donde el sector industrial seguirá llevando la delantera.