Defiende Fed política de compra de bonos (Reforma 18/02/11)

Defiende Fed política de compra de bonos (Reforma 18/02/11)

Ben Bernanke dijo que la rigidez del tipo de cambio también es responsable del sobrecalentamiento

 

Reuters

  

Washington DC,  Estados Unidos (18 febrero 2011).-   El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, defendió las políticas de dinero fácil en las economías avanzadas ante acusaciones de que están sobrecalentando a los mercados emergentes, afirmando que factores como la rigidez del tipo de cambio también deben ser responsabilizados.

 

Hablando antes de una cumbre diplomática en París donde se incluirán muchas críticas al agresivo programa de la Fed de compras de bonos del Tesoro, Bernanke reconoció este viernes que fuertes flujos de capitales de las economías avanzadas a los mercados emergentes podrían estar mostrando efectos negativos de contagio.

 

"Los flujos de capital nuevamente representan ciertos desafíos notables a la estabilidad financiera y macroeconómica internacional", dijo en comentarios preparados para pronunciarlos durante un evento en Banque de France, antes de un encuentro de ministros de Finanzas y banqueros centrales del G20 en París.

 

No obstante, dijo que aunque los funcionarios de política monetaria de los mercados emergentes claramente enfrentan desafíos, esas preocupaciones deberían ser puestas en perspectiva.

 

El propio programa de compra de bonos de Bernanke de 600 mil millones de dólares, lanzado en noviembre, ha provocado duras críticas alrededor del mundo, y en ocasiones anteriores el jefe de la Fed ha utilizado foros internacionales para defenderlo.

 

Las medidas de alivio cuantitativo de Estados Unidos han sido cuestionadas por llevar a la baja el valor del dólar, perjudicar las exportaciones de las economías emergentes y aumentar las burbujas de activos. Bernanke podría escuchar más de esto de sus contrapartes en la cumbre del G20.

 

Bernanke no mencionó directamente las preocupaciones inflacionarias, pero dijo que la fuerte demanda en los mercados emergentes está contribuyendo con el alza de los precios globales de las materias primas, algo que también afecta a las economías desarrolladas.

 

Disminuir gradualmente los desequilibrios globales en la inversión y el comercio es una prioridad para los funcionarios del G20. Los funcionarios se han fijado la meta de preparar una lista de indicadores para medir los desequilibrios, con el objetivo de impulsar un crecimiento más estable y menos propenso a ciclos de altibajos.

 

En comentarios muy parecidos a unos que hizo en el pasado, Bernanke expresó que el acelerado crecimiento en los mercados emergentes es uno de los factores que dirige los fuertes flujos de capital hacia esas economías.

 

El argumento de que es necesaria una mayor flexibilidad cambiaria para corregir los desequilibrios es un tema recurrente de los funcionarios estadounidenses, que han buscado persistentemente presionar a China para que permita que el yuan flote más libremente frente al dólar.

 

Washington quiere que el yuan siga siendo un centro de atención en el G20.

 

"El mantenimiento de divisas subvaluadas en algunos países ha contribuido con un patrón de gasto global que es desequilibrado e insostenible", mencionó Bernanke.

 

Las economías desarrolladas también están enfrentando los efectos de los fuertes flujos de capital hacia las economías emergentes a través de precios más altos, argumentó Bernanke.

 

Los precios más altos de alimentos y energía han aumentado las preocupaciones acerca de la inflación alrededor del mundo, y han llevado a que muchas autoridades de bancos centrales consideren endurecer las condiciones financieras, aun cuando ciertas economías permanecen débiles.