Exigen engordadores de ganado plan emergente para salir de la crisis (El Financiero 27/04/11)

(Héctor A. Chávez Maya) 

Miércoles, 27 de abril de 2011

Los engordadores de ganado del país exigirán al gobierno federal un plan emergente que les ayude a salir de la crisis que enfrenta el sector como consecuencia del aumento en los precios de los granos, que tan sólo de diciembre de 2010 a la fecha se han incrementado en más de 65 por ciento.

En conferencia de prensa, Álvaro Ley López, presidente de la Asociación Nacional de Engordadores de Ganado (ANEG), informó que en ese periodo el valor del maíz amarillo se les ha elevado de tres mil a cuatro mil 900 pesos, sin que esta alza haya impactado al consumidor final.

Hasta hace unas semanas, los engordadores habían podido absorber ese incremento porque contaban con inventarios de granos; sin embargo, la situación ha cambiado a últimas fechas, pues 80 por ciento de estas reservas se han acabado y ahora tienen que pagar precios altos por sus insumos.

Riesgo

Tal situación pone en peligro de desaparecer a por lo menos 10 por ciento de las 236 empresas engordadoras del país, si no logran integrarse de inmediato y reciben un apoyo de al menos 300 pesos por tonelada de grano por parte de la Sagarpa.

"Lo que teníamos que tener de capital de la alimentación en grano ahora no nos alcanza, por lo que requerimos de mayor capital. Hemos estado muy insistentes con la secretaría para poder establecer apoyos que nos ayuden a salir adelante, porque si no bajaría nuestra producción y seguirían cerrando algunas de nuestras engordas."

Dijo que la situación es tan grave que en lo que va del año los engordadores presentan pérdidas de 442.55 pesos por cabeza de ganado, superando los 138.27 de 2006.

"Estamos viviendo un problema muy serio por el alza de los granos, porque sus precios son estratosféricamente altos con relación a los precios que veníamos manejando; esto tiene un impactos muy fuerte sobre los costos del proceso de engorda."

Actualmente el precio de carne de bovino en canal es de 38 pesos por kilo, y en los próximos seis meses buscarán que llegue al menos a 42, lo que sí impactará al consumidor final.