No hay "plan B" para la reforma laboral: Lozano (El Financiero 02/06/11)

Zenyazen Flores

Jueves, 2 de junio de 2011

•"Los cambios no están en la agenda de prioridades del PRI".

•"No quieren despeinar a nadie", dice.

•La prórroga de 150 días para el dictamen es sólo un obstáculo.

El secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, sostuvo que el país no tiene un "plan B" que sustituya la reforma laboral en cuanto a la generación de empleos, y en todo caso, ese plan sería aplicar la ley vigente "con todo rigor" e impulsar la agenda de competitividad desde la microeconomía para alcanzar la meta de 800 mil nuevas plazas anuales.

Dijo que no hay indicio alguno de que será aprobado un periodo extraordinario de sesiones en el Congreso de la Unión.

En conferencia de prensa al término de su participación en el foro Empleo y Desarrollo, organizado por el ITAM, catalogó como "falsa promesa, un engaño y una mentira" el compromiso de la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados de dictaminar la iniciativa laboral antes de que concluya la prórroga legislativa de 150 días.

"Desafortunadamente todo indica que la reforma laboral no está en la agenda de prioridades del PRI... Las consultas y los 150 días sólo son para obstruir la reforma laboral", por lo que "viene una exhibida más fuerte en próximas comparecencias (para demostrar) que no quieren despeinar a nadie".

Ante la ausencia de la reforma laboral consideró que no hay más que la agenda de competitividad, que incluye el programa de infraestructura, gasto público eficiente y a tiempo, el Servicio Nacional de Empleo como la principal bolsa de trabajo del gobierno, regulación adecuada para facilitar negocios, financiamiento para las Pymes, incentivos de todo tipo para que vengan las plantas armadoras y maquileras, el combate a la inseguridad y la promoción del turismo.

Lo que tenemos que hacer con los sindicatos, con las empresas y grupos en general, sugirió, es tratar de que las cosas vayan cambiando a nivel micro, "en lugar de tener una legislación que a nivel macro facilite las cosas y trabajar el doble para abatir el rezago en justicia laboral que prevalece".

"Pero tal parece que nos queremos resignar a quedarnos con 600 o 650 mil empleos cuando podemos llegar a 800 mil, y también nos queremos resignar a tener siete mil 500 pesos al mes de salario cuando podríamos tener cuando menos diez mil pesos al mes si tuviéramos un poco más de productividad en el mercado laboral."

Detrás del atril con la leyenda "Un México con más empleos es un México más fuerte", dijo que en el mundo hay una necesidad creciente de adecuaciones normativas que le den un "respiro y nuevo espacio al mercado laboral después de la crisis de 2009", aún más en países como el nuestro, que "viene arrastrando una legislación muy ineficiente y que está desincentivando y arrojando a la gente a la informalidad".