Estados Unidos, hacia un prolongado estancamiento (El Financiero 06/09/11)

Eduardo Jardón

Martes, 6 de septiembre de 2011

•Problemas de confianza de los consumidores, la causa: Base.

Los indicadores de la economía estadounidense sugieren que se dirige hacia un periodo prolongado de estancamiento y no a una recesión.

De acuerdo con un análisis de Base Casa de Bolsa, este estancamiento es consecuencia de los problemas de confianza de los consumidores en Estados Unidos, y de la crisis ocasionada por los altos desequilibrios fiscales en Europa.

Según el reporte, en la primera mitad de este año la mayor economía del mundo presentó una recuperación menor a la estimada, lo cual fue ocasionado por el desastre ocurrido en Japón y por la incertidumbre generada entorno al nivel de deuda de ese país.

A esta coyuntura se suma la situación del consumidor, que se encuentra en un proceso de desendeudamiento y enfrenta altos niveles de desempleo, al mismo tiempo que el gobierno realiza acciones de austeridad para ajustar sus finanzas, lo que explica la desaceleración en el consumo.

Este panorama, aunado a la divulgación negativa de diversos indicadores económicos, mermaron la confianza de los consumidores, que además pudo ser afectada por la rebaja en la calificación de la deuda soberana de Estados Unidos.

Y, de igual forma, esto consiguió impactar en las expectativas del sector manufacturero, aunque su nivel se encuentra muy lejos del mínimo alcanzado durante la crisis.

Esto, argumentó Base Casa de Bolsa, implica un deterioro en los indicadores de percepción, lo que ha incrementado la aversión al riesgo, por la probabilidad de que la mayor economía del mundo entre nuevamente en recesión.

Sin embargo, los indicadores reales apuntan a un estancamiento, y destaca el desempeño de la producción industrial, que en los últimos meses se aceleró, a pesar de los temores de una recesión y de un menor dinamismo en el sector manufacturero.

Los analistas también descartaron una recesión en México, ya que no existe una crisis de confianza que limite el consumo interno, ni la creación de empleos. Para este año prevén que el Producto Interno Bruto del país crecerá 3.7 por ciento.