Inicia desaceleración económica en AL (El Financiero 31/10/11)

Inicia desaceleración económica en AL (El Financiero 31/10/11)

Ivette Saldaña

Lunes, 31 de octubre de 2011

•Esperan OCDE y Cepal una reducción en el PIB.

•Nuevos shocks externos afectarán más a los 180 millones de pobres.

•Sugieren poner atención a presiones cambiarias e inflacionarias .

 

· MENOR CRECIMIENTO EN AMÉRICA LATINA

América Latina inició la desaceleración económica, al esperarse una reducción en el aumento del PIB. El menor crecimiento se proyecta en 2012, con solo 4 por ciento, luego de que 2011 cerrará con 4.4 por ciento y de que 2010 registró una tasa de 5.4 por ciento.

 

En el informe Perspectivas Económicas de América Latina 2012, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) aseguran que la región es vulnerable a nuevos shocks externos, que afectarán más a los 180 millones de pobres del área.

 

Los especialistas de ambas organizaciones ven con preocupación que a causa de la crisis en los países desarrollados se presentó una fuerte entrada de capitales a estas economías, y observan presiones inflacionarias y cambiarias a las que "debe prestarse especial atención".

 

Otra de las variables económicas de alerta son los problemas fiscales en la zona euro, que "podrían ocasionar serios problemas en el sistema financiero internacional, incluidos los mercados emergentes, y una reversión de los flujos de capitales podría generar grandes fluctuaciones en los tipos de cambio, con efectos disruptivos sobre la economía real".

 

Por ello sugieren a los gobiernos latinoamericanos introducir políticas macroeconómicas coherentes con las necesidades de largo plazo, que generen más crecimiento, mejoren la competitividad, diversifiquen las economías y dejen la dependencia a los sectores intensivos en recursos naturales.

 

Prioridades

 

Algunas de las recomendaciones son contar con fondos de estabilización y reglas fiscales creíbles suficientemente flexibles para adaptarse a circunstancias económicas excepcionales.

 

También buscar la manera de ampliar el espacio fiscal para reaccionar a los reveses de los mercados internacionales, además de mejorar la recaudación tributaria, porque sólo representó 19 por ciento del PIB en toda Latinoamérica, mientras que en la OCDE se capta 35 por ciento del PIB en promedio.

 

Entre las prioridades sugieren trabajar en la reducción de la desigualdad y la pobreza, ya que actualmente uno de cada tres individuos vive en pobreza, lo que se traduce en 180 millones de personas en toda la región.

 

Si se incrementara el nivel de ingresos tributarios se permitiría a los gobiernos invertir más y mejorar los servicios públicos, especialmente en el caso de la educación, la innovación y el desarrollo de la productividad y la infraestructura.

 

De no hacerse así y de seguir dependiendo de la exportación de materia prima, el número de pobres en el área se podría elevar e incluso las clases medias incipientes serían vulnerables a los shocks adversos, como desastres naturales y enfermedades.

 

Además, si no se busca disminuir la desigualdad e impulsar mejores condiciones de vida se podrían agudizar los conflictos sociales y debilitar las instituciones.

 

En el estudio, la Cepal y la OCDE, que presiden Alicia Bárcena y José Ángel Gurría, aseguran que los niveles de gasto público social son muy dispares en la región, lo que refleja la diversidad de modalidades con que se brindan los servicios de salud y pensiones, pero también el escaso grado de cobertura en "bienes públicos esenciales" en algunos países.

 

De ahí que reiteran la necesidad de atender como puntos prioritarios la inversión en infraestructura, en innovación y educación.