Eurozona pide a Italia cumplir promesa de reducir el déficit (El Financiero 08/11/11)

(AFP)

Martes, 8 de noviembre de 2011

•Exhorto a gobierno entrante de Grecia a apoyar el plan de ayuda.

•Ministros de Economía intensifican presión contra ambos países.

•Misión visitará Roma esta semana; "troika" irá de nuevo a Atenas.

· Grecia cede a Italia la estafeta en eurocrisis

BRUSELAS, 7 de noviembre.- Los ministros de Economía de la eurozona exigieron al gobierno de Silvio Berlusconi que cumpla con sus promesas para reducir el déficit de Italia, y exhortaron al nuevo gobierno de Grecia a que apoye por escrito los planes de ayuda pactados.

Una misión visitará Italia este martes o el miércoles para comprobar que se toman las medidas a las que se comprometió Roma en una carta el 26 de octubre, durante la última cumbre europea, indicó el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, al finalizar una reunión de los 17 ministros de Economía de la zona euro.

"El ministro italiano de Economía, Giulio Tremonti, nos ha garantizado su determinación de cumplir cuanto antes con la puesta en marcha de las medidas detalladas en una carta que el mandatario italiano Silvio Berlusconi entregó a sus homólogos europeos el 26 octubre", dijo Rehn.

En esa misiva, Berlusconi presentó sus metas para reactivar el crecimiento y reducir la colosal deuda de Italia, que se eleva a 1.9 billones de euros (120 por ciento del PIB).

Más temprano, Rehn instó a Italia a jugar "al catenaccio" (estilo de futbol muy defensivo) en materia de consolidación fiscal.

Las principales bolsas europeas terminaron en rojo este lunes, preocupadas por la falta de credibilidad de Italia. La única que subió fue la Bolsa de Milán, 1.32 por ciento, a 15 mil 549 puntos, impulsada por rumores de dimisión de Berlusconi, negados por el mandatario italiano.

La falta de credibilidad de las promesas de Berlusconi es latente. Las tasas de interés a largo plazo de las obligaciones italianas treparon a 6.5 por ciento, alcanzando un nuevo récord desde la creación del euro.

Los jefes de la economía de la Unión Monetaria también intensificaron su presión contra Grecia, tras una semana de elevada agitación política que provocó el caos en los mercados y la dimisión del primer ministro Giorgos Papandreu.

"Pedimos a las nuevas autoridades de Grecia que envíen una carta, firmada por los dos partidos del nuevo gobierno", en la que reafirmen su compromiso de que apoyan los planes de ayuda recientemente acordados, dijo el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.

Acuerdo griego

Las declaraciones ocurrieron luego de que los dos principales partidos políticos griegos, los socialistas en el poder y la derecha opositora, alcanzaron un acuerdo sobre un primer ministro interino para sacar al país de la crisis.

El nombre del nuevo primer ministro será anunciado el martes, según acordaron Papandreu y el líder conservador Antonis Samaras.

El parlamento griego prevé ratificar antes de diciembre el acuerdo pactado el 27 de octubre en Bruselas, que permitirá a Atenas borrar cien mil millones de euros hacia 2020 de los 350 mil millones del total de su deuda pública (equivalente a 165 por ciento del PIB).

Los ministros europeos elogiaron a toda la "clase política" griega por "restaurar la confianza que se había perdido", luego de que Papandreu convocara a un referéndum para decidir sobre este paquete de ayuda, que finalmente anuló.

Ahora "creemos que es posible que el sexto tramo de ayuda (de ocho mil millones de euros, correspondientes a un paquete de ayuda acordado en 2010) se entregue en noviembre a condición de que haya un claro y unívoco compromiso por parte del nuevo gobierno", indicó Rehn.

Sin un pago rápido de esa ayuda, Grecia quedará en situación de suspensión de pagos a mitad de diciembre.

Los expertos de la "troika", compuesta por el Banco Central Europeo, la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, irán a Atenas próximamente para afinar los detalles del segundo paquete de ayuda, prometido el 27 de octubre y que sustituye al acordado en una cumbre el 21 de julio.

A cambio, los principales acreedores de Grecia exigen más sacrificios y medidas de austeridad.