Semana decisiva para la eurozona; "ahora o nunca" (El Financiero 05/12/11)

Semana decisiva para la eurozona; "ahora o nunca" (El Financiero 05/12/11)

Clara Zepeda Hurtado

Lunes, 5 de diciembre de 2011

Jueves y viernes, cumbre de jefes de Estado y de gobierno de la UE.

Se espera un plan definitivo para resolver la crisis.

Contracción de la euroeconomía pasará factura al mundo.

  

· Hora decisiva para el futuro del euro

 

Ante la llamada de los agentes económicos internacionales de que es "ahora o nunca" para decidir el destino del euro, el efecto de la contracción económica de Europa sobre el resto del mundo se convierte en la nueva incertidumbre.

 

Pese al optimismo de corto plazo de los mercados financieros, la zona euro llega a una semana decisiva para que las autoridades de la Unión Europea (UE) anuncien un plan definitivo para resolver su crisis de deuda soberana, que les ha sido esquivo durante dos años, y cuyo resultado en Bruselas este jueves y viernes es bastante incierto.

 

De acuerdo con los análisis semanales de Intercam Casa de Bolsa y Scotiabank, la tardanza en solucionar la crisis de deuda en Europa pasará la factura al mundo, ya que los principales problemas que afectan el desempeño de la economía global están lejos de tener una solución definitiva.

 

"Los mercados llevan por lo menos un año sujetos a los vaivenes políticos, ya sea de Europa, de Medio Oriente o de Estados Unidos, y eso no es lo normal.

 

"Una vez que se despejen las dudas políticas de Europa, que son las predominantes, la atención de los inversionistas regresará a los temas económicos, que son los motores de siempre, y se encontrarán con una situación nuevamente muy incierta", alerta Patricia Berry, directora de Análisis de Intercam.

 

Si todo va según los planes fraguados en Berlín y París, los jefes de Estado y de gobierno de la UE habrán dado un paso hacia la integración fiscal el viernes por la noche, acordando un cambio en el tratado para anclar una disciplina presupuestaria coercitiva para la eurozona de 17 países.

 

Pero antes, el jueves se espera que el Banco Central de Europa (BCE) recorte nuevamente la tasa de referencia, de 1.25 a 1 por ciento.

 

Además, los nuevos dirigentes "tecnócratas" en Italia, que la tarde de este domingo anunció un drástico plan de ajuste para capear la crisis, Grecia y España tendrán que demostrar su compromiso para llevar a cabo medidas de austeridad y reformas económicas estructurales; mientras que el papel de intervención del BCE será el más esperado.

 

Gris panorama

 

"Aunque los líderes europeos establezcan políticas y mecanismos creíbles y nadie caiga en incumplimiento, la solución de la crisis política de ninguna manera significa la solución de los problemas económicos", describe Berry.

 

Añade que la realidad es que la mayoría de las economías de la zona euro se encuentra en recesión, y su futuro luce muy gris porque los ajustes fiscales se profundizarán en 2012 y no terminarán antes de 2014.

 

Alemania, la única economía grande que sigue creciendo, vive principalmente de sus exportaciones en la zona euro, por lo que es previsible que no pueda evitar una desaceleración severa.

 

En el resto del mundo casi todos los países han estado adoptando medidas para protegerse de un eventual colapso de Europa, por ahora es imposible saber el efecto que al final tendrá la inevitable contracción europea sobre las demás economías.

 

China se ha venido desacelerando en los últimos meses y el cliente más grande para sus exportaciones es Europa. La economía de Estados Unidos va cobrando fuerza, pero el proceso es muy lento, de manera que 2012 seguirá siendo de bajo crecimiento y de más preguntas que respuestas, porque se trata de un año electoral.

 

"Europa tiene que encontrar la forma de propiciar serios ajustes fiscales sin detener el crecimiento y sin afectar a su sector bancario.

 

"Estados Unidos tiene que comenzar a realizar un ajuste fiscal convincente para estabilizar la estratosférica deuda pública y sin que detenga el frágil ritmo de crecimiento económico en marcha", afirma Mario Correa, director de Estudios Económicos de Scotiabank.

 

Dado este "entrampamiento", la volatilidad seguirá siendo especialmente elevada.