Superávit comercial de 5 mil 141 mdd con EU (El Financiero 12/03/08)

(Arturo Robles)

Miércoles, 12 de marzo de 2008

Se enfrían las importaciones estadounidenses.

La balanza comercial entre Estados Unidos y México, en enero de 2008, fue favorable para nuestro país por 5 mil 141 millones de dólares, saldo inferior en mil 370 millones de dólares al de diciembre de 2007, informó el Departamento de Comercio del vecino país del norte.

El resultado muestra que la debilidad del dólar ha provocado un encarecimiento en las importaciones. Adicionalmente, la menor demanda de bienes intermedios y de consumo por el vecino país ha enfriado los envíos de México.

Los resultados revelan que el valor de las importaciones mexicanas se ubicaron en 17 mil 20 millones, cantidad superior en 1.7 por ciento comparada con diciembre de 2007.

A su vez, las exportaciones estadounidenses a México se ubicaron en 11 mil 878 millones, cantidad superior en 16.1 por ciento a las registradas en diciembre del año pasado.

La información refiere que el impacto de la desaceleración estadounidense afecta el desempeño de la actividad comercial de México, y es que más de 80 por ciento de las exportaciones mexicanas tienen como principal destino al vecino país del norte.

Y aunque la mayor demanda de productos mexicanos fue de petróleo crudo -dos mil 942 millones de dólares-, los pedidos del energético no compensaron la disminución de productos de la industria manufacturera.

Estadísticas de la dependencia estadounidense señalan que México se ubicó en el cuarto lugar entre los países, con un intercambio comercial favorable, sin embargo, de las cuatro naciones fue la única que mostró una disminución en su superávit mercantil.

El mayor saldo a favor lo ocupó China, con 20 mil 313 millones. En segundo lugar quedó Japón, con un saldo positivo de seis mil 592 millones, y Canadá ocupó el peldaño tres con cinco mil 865 millones.

El informe detalló que la factura de las importaciones de petróleo se ubicaron en un nivel récord, principalmente por la elevada cotización que ha alcanzado el energético.

Por otra parte, la demanda de productos no petroleras fue menor y reflejó la desaceleración económica, al reducir las importaciones de bienes intermedios para la fabricación de bienes de uso duradero.