Degradación de ecosistemas pone en peligro al campo (El Financiero 31/01/12)

Degradación de ecosistemas pone en peligro al campo (El Financiero 31/01/12)

Héctor A. Chávez Maya

Martes, 31 de enero de 2012

Severo agotamiento de recursos naturales.

Desertificación afecta dos de cada tres hectáreas.

Pérdida económica por alrededor de 10% del PIB.

 

La degradación de ecosistemas y agotamiento de recursos ambientales se agudizan de manera alarmante, lo que pone en peligro las actividades productivas en el medio rural, advirtieron especialistas.

 

Tan sólo la desertificación en México afecta dos de cada tres hectáreas, lo que ha provocado menor superficie agrícola y forestal, con una pérdida económica de alrededor de 10 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

 

Carlos Sandoval Miranda, especialista en valuación rural, agropecuaria y forestal de la Asociación Pro Derechos de la Propiedad Rural, explicó que esto sucede debido a que los gobiernos estatales y locales apuestan al desarrollo económico de corto plazo sin considerar los impactos futuros del cambio climático.

 

Prueba de ello, dijo, es el impacto de heladas, inundaciones y sequías en 19 estados del país, y la pérdida de producción de granos y hortalizas en 2011, que ponen a 70 millones de mexicanos en condiciones de vulnerabilidad frente al cambio climático.

 

Gustavo Sánchez, de la Red Mexicana de Esfuerzos contra la Desertificación y la Degradación de los Recursos Naturales (Riod-Mex), lamentó que a pesar de los efectos devastadores no exista algún programa gubernamental para resolver el problema.

 

Señaló que aun cuando México suscribió la Convención contra la Desertificación, que obliga a los países a armonizar sus políticas y leyes para aprovechar los esfuerzos en el combate a este problema, continúa el deterioro de la superficie del país.

 

Citó como ejemplo que hay alrededor de 120 millones de hectáreas afectadas por este fenómeno, y las principales causas son la pérdida de fertilidad, que se presenta en 18 por ciento del territorio; la erosión hídrica, en 12 por ciento, y la erosión eólica, en 11, así como la salinización, en 8 por ciento de las tierras de riego.

 

Causas

 

Entre las consecuencias de ese problema están el acarreo de alrededor de 530 millones de toneladas de azolves al año, deforestación de unas 500 mil hectáreas, inutilización de diez mil por salinización y reducción del rendimiento de las cosechas a menos de la tercera parte del potencial de la tierra.

 

Asimismo, la disminución de la capacidad de carga en predios de pastoreo a menos de la cuarta parte o la producción forestal a menos de un décimo del potencial técnico de los bosques y selvas del país.

 

El 93 por ciento de la degradación de la tierra fue ocasionada por malas técnicas de manejo, como es el caso del sobrepastoreo, aprovechamiento forestal sin planeación, uso inadecuado y excesivo de maquinaria, aplicación de agroquímicos, roturación inadecuada, laboreo excesivo o mala aplicación del riego.

 

A su vez, Tarín Ramírez, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), señaló que la degradación se debe a varios factores, como el hecho de que el aire afecta el norte y el noroeste, donde más de 90 millones de hectáreas pierden hasta 200 toneladas de suelo por hectárea al año.

 

Destacó que las regiones donde existe una degradación de la tierra se correlacionan con zonas de fuerte expulsión de mano de obra hacia Estados Unidos, como Durango, Zacatecas, Aguascalientes, San Luis Potosí, Guanajuato y Michoacán.