PIB mundial acentúa su desaceleración (El Financiero 16/08/12)

(Eduardo Jardón) 

Jueves, 16 de agosto de 2012

La economía mundial acentuó su desaceleración en el segundo trimestre de este año, al reportar un crecimiento anual de 2.7 por ciento.

Analistas de Capital Economics señalaron que este avance sería el más bajo desde principios de 2009, y obedece a la pérdida de dinamismo en las mayores potencias económicas.

En un reporte, detallaron que Estados Unidos, Japón y la zona euro, que concentran alrededor de 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, se debilitaron en los últimos meses y no hay indicios de una mejoría en la segunda parte del año.

Andrew Kenningham, analista de la firma, destacó que la desaceleración fue notable, sobre todo en Estados Unidos, donde el crecimiento se redujo de 4.1 por ciento en el cuarto trimestre de 2011 a 1.5 en el segundo trimestre de este año, y es probable que se mantenga por debajo de 2 por ciento en lo que resta de 2012.

Sin embargo, el especialista indicó que esta pérdida de dinamismo no ha sido una magnitud suficiente que amerite un mayor estímulo por parte de la Reserva Federal.

Incluso, opinó que si el banco central de Estados Unidos anuncia una nueva ronda de flexibilización cuantitativa (QE3), es probable que ésta tenga un mayor impacto sobre los precios de los activos que en la actividad económica.

En su estudio, el economista apuntó que el mayor lastre para la economía mundial en el segundo semestre será el desempeño de la zona euro, la cual probablemente entró en recesión en el segundo trimestre.

Mencionó que los indicadores de confianza y los datos preliminares del sector manufacturero son consistentes con una fuerte caída del PIB en los países de la periferia y una recesión más suave en las economías centrales.

México también

Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody's Analytics, estimó que la economía mexicana creció 4.6 por ciento en el segundo trimestre, y anticipa que la actividad se desacelerará en la segunda mitad del año, particularmente en el último trimestre.

Lo anterior, debido a que "la economía sufrirá el efecto opuesto del ciclo político: el impacto negativo en el gasto generado por la terminación de las elecciones y por el cambio de administración".

Esta desaceleración se extenderá en el primer semestre del siguiente año, por el retraso en la ejecución del gasto ante el arribo del nuevo gobierno.

Según Coutiño, este factor propiciará un menor avance del PIB en 2013, que sería de alrededor de 3.5 por ciento, menor al 4.3 por ciento previsto para este año.