Insiste la IP en la necesidad de una política industrial (El Financiero 14/11/12)

Isabel Becerril

Miércoles, 14 de noviembre de 2012

Urge reconstruir las cadenas productivas: Sergio Cervantes.

El sector fabril está lanzando gritos de auxilio para que sea escuchado en el nuevo sexenio y por fin se arme la política industrial que necesita el país para reconstruir las cadenas productivas que se han ido destruyendo desde hace tres décadas en un proceso que continúa.

Sergio Cervantes Rodiles, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), dijo que la siguiente reforma a discutir en el Congreso debe ser la hacendaria, y para 2014 o 2015 la energética.

Al participar en el segundo día del foro "Desafíos de la economía mexicana ante el cambio de gobierno", organizado por el Instituto Tecnológico de Monterrey campus Estado de México, señaló que la IP cuenta con la promesa del presidente electo, Enrique Peña Nieto, de que se reunirá cada dos meses con los empresarios, a fin de tener un trato directo con ellos y "destrabar" los puntos en que no se haya llegado a una solución.

Balance

En su exposición, Cervantes Rodiles hizo un balance del gobierno de Felipe Calderón e indicó que en la parte macroeconómica el gobierno ha tenido éxito, porque al tener en línea las variables ha conseguido la estabilidad macro; sin embargo, el bolsillo de los mexicanos no ha captado esos beneficios.

Afirmó que a la actual administración le ha faltado proporcionarle al sector privado las herramientas necesarias para ser competitivo y poder no sólo enfrentar los embates de los productos extranjeros en el mercado local, en particular los procedentes de Asia, sino para poder salir a flote y fortalecerse.

Respecto a ese último punto destacó que uno de los mecanismos que coadyuvan al desarrollo de la planta fabril, sobre todo la pequeña -que es la más débil de la economía-, son las compras de gobierno.

Recordó que a principios del sexenio el gobierno destinó 39 mil millones de pesos al Programa de Compras de Gobierno y para este año esa cifra terminará en 90 mil millones.

Cuando arrancó ese proyecto, el contenido nacional de los productos era de 35 por ciento, y "lo vamos a dejar en 65 por ciento".

Sin embargo admitió que en ocasiones las ventas al gobierno quedan en manos de empresas comercializadoras, pero no hay forma de corroborarlo, porque cuando se asignan las compras, las compañías protestan de decir la verdad, "pero ya vamos a empezar a trabajar en la transparencia del programa".

Acerca de las reformas estructurales que necesita el país planteó que en la hacendaria uno de los puntos fundamentales debería ser la eliminación del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) o la fusión de éste y el Impuesto Sobre la Renta (ISR), pero de ninguna forma debe permanecer el IETU, que lo único que ha ocasionado es descapitalizar a las pequeñas firmas.