Finanzas públicas mantienen dependencia en precio del crudo (El Financiero 13/12/12)

Miguel Ángel Pallares Gómez

Jueves, 13 de diciembre de 2012

· Las finanzas públicas continuarán con su dependencia del petróleo

El aumento en el precio del barril de petróleo aprobado en la Ley de Ingresos de la Federación 2013 implica mantener la dependencia de las finanzas públicas en el energético, por lo que para modificar este modelo inercial de captación de recursos será necesaria una reforma fiscal en los próximos años, señalaron especialistas.

La Cámara de Diputados aprobó ayer en lo general y lo particular el dictamen que contiene el alza en el barril de crudo de 84.9 a 86 dólares, lo que implicará cuatro mil 500 millones de pesos adicionales a los ingresos captados en este rubro.

Asimismo, se mantuvieron sin cambios las formas para deducir de impuestos los gastos médicos y de transportación pagados en efectivo.

Alejandro Villagómez, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), afirmó que los ajustes en la iniciativa son relevantes, ya que un tercio de los ingresos públicos proviene del petróleo y una caída abrupta en el precio del crudo implicaría una contracción importante de los ingresos.

"Lo que hace el gobierno es comprar la cobertura que da garantía en caso de una caída, pero el problema es que el gobierno sigue dependiendo de este producto.

"El margen que negocian en el Congreso no pasa de 7 a 8 por ciento, pero tampoco pueden hacer nada más si no se plantea una reforma fiscal; ahora no les daba tiempo para una reforma, habría que esperar al próximo año para ver la línea que caracterice a esta administración", apuntó.

Actitud cómoda

Leticia Armenta, directora del Centro de Análisis Económico del Tecnológico de Monterrey, explicó que las finanzas públicas no logran desprenderse del petróleo.

"No ha habido una reforma fiscal que busque recursos alternativos para la Federación y mientras no se trabaje en esa línea, el petróleo seguirá siendo una de las fuentes principales de ingresos.

"Entre 2011 y 2012, el precio promedio anual del petróleo ha estado entre cien y 102.5 dólares por barril; esos precios altos lamentablemente generan un estímulo para mantener la dependencia, porque francamente se vuelve cómodo", indicó. Armenta abundó que "lo malo de la actitud cómoda es que no busca emplear la materia prima no renovable de la mejor manera posible, y no hemos avanzado en la transformación de los hidrocarburos".

Gabriel Pérez del Peral, director de la Escuela de Economía de la Universidad Panamericana, opinó que "las finanzas públicas siguen petrolizadas, ya que de cada diez pesos que obtiene Hacienda, cuatro provienen del petróleo, por lo que se presenta la necesidad de una reforma que fortalezca los recursos tributarios.

"Es un mensaje de precaución ante la inestabilidad internacional, es un mensaje también en el sentido de cuidar el crecimiento de 3.5 por ciento en el Producto Interno Bruto para 2013; la característica es la prudencia", manifestó.

Los académicos añadieron que gran parte del presupuesto a nivel federal es inercial e irreductible, pues no trae cambios en la modernización del gasto público o en los subsidios.