Se evitará un deterioro permanente de las finanzas públicas (El Financiero 07/01/13)

(Marcela Ojeda Castilla)

Lunes, 7 de enero de 2013

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El aumento en el precio de las gasolinas y el diesel es necesario para evitar un deterioro permanente de las finanzas públicas -mediante el subsidio, que en 2012 ascendió a 206 mil millones de pesos a noviembre-, señaló el subsecretario de Ingresos, Miguel Messmacher.

Luego de dar a conocer el nuevo incremento de 11 centavos en los precios de las gasolinas Magna y Premium, así como del diesel, con lo que desde el 5 de enero se ubican en 10.92, 11.48 y 11.28 pesos por litro, respectivamente, dijo que la política de ajustes graduales busca balancear dos objetivos:

"Por un lado, atenuar el impacto de los mayores precios internacionales de los combustibles sobre las finanzas de las empresas y el bolsillo de los hogares, y -por el otro- evitar un deterioro permanente de las finanzas públicas del país."

El funcionario de la Secretaría de Hacienda apuntó que "el contexto mundial de problemas de confianza en los principales países avanzados implica que es fundamental preservar la fortaleza de las finanzas públicas de México, y con eso brindar certidumbre a todos los mexicanos".

Indicó que los incrementos mensuales no necesariamente tienen que ser siempre más altos, en virtud de que están determinados por el costo de oportunidad que viene dado por el precio internacional, y por la inflación doméstica.

"En la medida en que haya fluctuaciones distintas de los precios internacionales podríamos llegar a observar ajustes en los deslices, que pudiesen ser al alza o a la baja.

"No necesariamente tenemos por qué estar esperando que vaya a haber una trayectoria ascendente permanentemente en los deslices, sino que dependerá, en buena medida, de qué es lo que esté pasando con el costo de oportunidad y con el costo internacional de los combustibles", enfatizó.

Respecto del efecto de este ajuste sobre la inflación, dijo que sería cercano a 0.01 por ciento en el mes, por lo que no representaría una presión inflacionaria.

Por otra parte, subrayó que con la nueva alza, cálculos desestacionalizados -por la época invernal, que significa precios temporalmente bajos en Estados Unidos- indican que el precio de la gasolina Magna aún estaría alrededor de 10 por ciento por debajo del de su similar en ese país; el de la Premium en cerca de 14 y el del diesel en aproximadamente 17 por ciento.

Esto también refleja que pese al alza de nueve centavos anunciada el 7 de diciembre, la brecha entre los precios de las gasolinas Magna y Premium, y sus pares en Estados Unidos, lejos de acortarse se amplió, pues el diferencial era de 8 y 12 por ciento, respectivamente, mientras que el del diesel se acortó de 24 a 17 por ciento.