México perderá productividad con el proyecto Dragon Mart (El Financiero 31/01/13)

Isabel Becerril

Jueves, 31 de enero de 2013

Riesgo de triangulación comercial: CEESP.

Si el gobierno autoriza el proyecto Dragon Mart, México estará en la antesala de una pérdida de capacidades productivas y creación de comercio, alerta el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

Además, el proyecto representa un antecedente para triangular el comercio internacional y crear un acceso preferencial al mercado de Estados Unidos.

En un documento sobre Dragon Mart, el organismo que dirige Luis Foncerrada advierte que México no debe correr el riesgo de convertirse en exportador de materias primas al mercado chino a cambio de bienes manufacturados para consumo final, ya que ni siquiera la relación con Estados Unidos se caracteriza por este tipo de intercambio.

La intensificación del comercio de bienes primarios contraviene todo intento de escalamiento industrial y, derivado de esto, anula toda posibilidad de lograr mayores tasas de crecimiento económico e incluyente, explica.

Precisa que en estos momentos el intercambio mercantil con China se ha traducido en una balanza comercial negativa para nuestro país, un déficit excesivamente creciente que genera señales de alarma.

El déficit comercial de productos no petroleros acumulado durante enero-noviembre de 2012 alcanzó 47 mil 144 millones de dólares, aproximadamente 4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Tan sólo en 2011 las importaciones provenientes de China representaron casi 15 por ciento de las adquisiciones mexicanas al exterior.

La creciente cuota del mercado mexicano para las importaciones procedentes del país asiático responde a una mayor competitividad de sus manufacturas, básicamente derivadas de un bajo costo salarial, pero también de un fuerte intervencionismo del Estado chino.

Ello se ha traducido, en los hechos, en un desplazamiento gradual de productos tanto estadounidenses como mexicanos, ya que la mayoría de los artículos importados por nuestro país a China son manufacturas, y en algunos casos para consumo final, como electrónica, autopartes, automotriz, muebles y juguetes.

Esa situación va en contra de los acuerdos de política comercial de México, porque se está viendo un caso de desplazamiento, y no de creación de comercio en la relación México-China.

Para el CEESP, México desea profundizar sus relaciones mercantiles no sólo con Estados Unidos, sino también con otros bloques comerciales como China, pero sobre la base de una competencia sana, un comercio justo, ajeno a prácticas desleales y libre de intervencionismo estatal.