Se rezagan mujeres en economía digital (Reforma 15/10/13)

 Por Xinhua

Santiago Chile (15 octubre 2013).-   La desigual participación de las mujeres en la economía digital afecta el desarrollo de América Latina y el Caribe, advierte un documento presentado este martes en la XII Conferencia Regional sobre la Mujer de la región, que se celebra en República Dominicana.

El estudio "Mujeres en la economía digital: superar el umbral de la desigualdad", elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), subraya que las mujeres equiparan a los hombres en acceso a internet en varios países de América Latina, pero están en clara desventaja con respecto a su uso.

"Esto limita tanto el desarrollo personal y laboral de la población femenina como el crecimiento con igualdad de los países de la región en el marco del nuevo paradigma tecnológico", destaca.

"La tasa de uso de internet de las mujeres es en promedio 8.5 por ciento menor a la de los hombres en 10 países con información disponible".

Contar con habilidades para el uso de las tecnologías de la información y comunicaciones (TICs) sería una herramienta para la inserción laboral de las mujeres, agrega.

Casi la mitad de las mujeres de la región -que representan 50.9 por ciento de la población, más de 300 millones de personas- no tienen ningún vínculo con el mercado laboral.

Mientras, la tasa de actividad económica femenina asciende a 49.8 por ciento (la masculina llega a 78.7 por ciento). y una de cada 10 mujeres está empleada en servicio doméstico, una de las labores peor remuneradas y con menor protección social.

La economía digital incluye la infraestructura de telecomunicaciones -particularmente las redes de banda ancha-, las industrias de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs) -hardware, software y aplicaciones- y el grado de alfabetización digital de los usuarios.

Reconoce que la mayoría de los países de la región tienen ya estrategias digitales nacionales, que han permitido avances en el acceso de toda la población a las TICs, pero en muchas de ellas no se incluyen acciones para promover la igualdad de género, aunque se destacan las experiencias de Ecuador, México y República Dominicana.

"En todos los países aumentó en los últimos años la proporción de hombres y mujeres que declaran usar internet desde cualquier punto de acceso, pero sólo en Brasil, México y Uruguay la brecha entre ambos sexos se redujo. En el resto se amplió", afirmó.

La CEPAL advierte sobre la falta de participación de las mujeres en la producción de contenidos digitales, lo que genera un alto grado de sexismo.

En la industria de los videojuegos, por ejemplo, es recurrente la representación de mujeres como objetivos pasivos y sexuales y de hombres como sujetos activos y violentos

Esta brecha digital de género es más frecuente en áreas urbanas que rurales, y afecta principalmente a las mujeres de mayor edad de todos los niveles educativos.

"La diferencia entre mujeres y hombres es de casi 5 puntos en Chile (39.3 por ciento contra 44 por ciento), país que cuenta con una de las mayores tasas de uso de esta tecnología".

En Perú, 26 por ciento de las mujeres y 34.1 por ciento de los hombres dicen ser usuarios; mientras en El Salvador un 70.3 por ciento de las mujeres y un 75.5 por ciento de los hombres con educación universitaria utilizan las TICs.

Por su parte, en Brasil, 4.3 por ciento de las mujeres y 7.4 por ciento de los hombres de 65 años y más declaran usar internet, diferencia que se repite en países como Costa Rica (3.1 por ciento y 7.1 por ciento) y Ecuador (2.1 por ciento y 4.1 por ciento).

En Uruguay, el país menos desigual en este ámbito, 34.5 por ciento de las mujeres del primer quintil declaran usar internet contra 63 por ciento del quinto quintil.

"La desigualdad sólo se revierte en el caso de las mujeres asalariadas, que muestran tasas de uso de internet superiores a las de los hombres", afirma el documento.

"Garantizar la autonomía económica de las mujeres, aumentando su participación en el mercado laboral y reconociendo el trabajo no remunerado que ellas realizan mayoritariamente, es uno de los principales desafíos de los países de la región", planteó la CEPAL.

Señala que, como en la economía digital se reproducen desigualdades de género presentes en el resto de la sociedad, urgen políticas que prevengan la segregación laboral, eviten las brechas salariales y promuevan una justa división sexual del trabajo.

La segregación laboral, dice el organismo de las Naciones Unidas, es patente en el mundo de la ciencia, pese a que en los últimos años ha aumentado el número de mujeres en esta área.

Explica que la primera segregación se refiere al hecho de que las mujeres se concentran en disciplinas relacionadas con las ciencias de la salud, sociales, humanísticas y naturales, dejando en último lugar a las ciencias exactas e ingenierías, donde predominan los hombres.

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