Finaliza BCE plan de estímulo monetario (Reforma 13/12/18)

Finaliza BCE plan de estímulo monetario (Reforma 13/12/18)

 

EFE

Frankfurt, Alemania (13 diciembre 2018).- El Banco Central Europeo (BCE) termina este año las compras de deuda pública y privada de la zona del euro en un momento difícil porque se ha debilitado el crecimiento económico, pero el dinero seguirá siendo barato durante bastante tiempo.

 

El presidente del BCE, Mario Draghi, se mostró hoy cauteloso ante este debilitamiento y los factores de riesgo que amenazan el crecimiento e hizo un balance positivo sobre la efectividad del programa de expansión cuantitativa, como se conoce a la compra de grandes cantidades de deuda.

 

"Ha sido el único impulso de la recuperación económica de la zona del euro", en un momento en que no había otras fuentes de crecimiento, dijo Draghi.

 

A finales de diciembre, el BCE habrá adquirido bonos por valor de 2.6 billones de euros.

 

En opinión de Draghi, la expansión cuantitativa, que esta semana el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que era legal, forma parte de las herramientas de política monetaria del BCE y podría ser utilizada en el futuro de nuevo en caso necesario.

 

El programa no excede el mandato del BCE y no incumple la prohibición de financiamiento a un Estado miembro, según la Justicia europea, pese a las dudas del Constitucional alemán.

 

Draghi indicó que las tasas de interés habían bajado antes de que el BCE empezara a comprar grandes cantidades de deuda, pero después de aplicar el programa de expansión cuantitativa disminuyeron más.

 

El BCE decidió adquirir grandes cantidades de deuda de la zona del euro, sobre todo deuda soberana, porque los países de la periferia estaban siendo penalizados por el mercado y las tasas que tenían que pagar para refinanciarse eran muy altas, pese a que el banco había bajado mucho el precio del dinero tras la crisis financiera.

 

El programa de compra de deuda, que comenzó en marzo del 2015, ha incluido la compra de bonos soberanos y otros títulos de deuda pública, además de la emitida por empresas, bonos garantizados (cédulas) y bonos de titulización de activos.

 

De este modo, el BCE inyectó dinero en el sistema y estimuló el crecimiento de la economía.

 

Al comprar bonos también ha presionado a la baja las tasas de interés a largo plazo.

 

Pero el crecimiento se ha debilitado desde hace algún tiempo, constató el italiano Draghi.

 

También manifestó que se mantiene la incertidumbre por factores geopolíticos, el proteccionismo, las vulnerabilidades de las economías emergentes y la volatilidad en los mercados financieros.

 

El mercado espera que la normalización de la política monetaria del BCE será lenta y gradual, debido al reciente debilitamiento económico.

 

De hecho, el BCE ha revisado a la baja una décima las previsiones de crecimiento de la zona del euro para este año hasta el 1.9 por ciento y para el 2019 a 1.7 por ciento y mantiene las del 2020 en 1.7 por ciento.

 

Pese a dejar de comprar deuda, el BCE seguirá en el mercado porque va a reinvertir los bonos adquiridos que vayan venciendo.

 

La reinversión de los bonos soberanos se basará en la participación de los bancos centrales nacionales en el capital del BCE, como las compras.

 

El BCE invertirá los bonos que venzan "durante un período prolongado una vez que comience a subir las tasas de interés", pero Draghi no quiso concretar cuándo será ese momento.

 

La entidad también mantuvo las tasas de interés de referencia a las que presta a los bancos semanalmente en el 0 por ciento y les cobra un 0.4 por ciento por el exceso de reservas y lo seguirá haciendo hasta, al menos, el verano del 2019.