Estados y municipios enfrentan fuertes presiones fiscales (El Financiero 04/08/09)

Clara Zepeda Hurtado

Martes, 4 de agosto de 2009

Aunque el mercado bursátil mexicano es más receptivo para realizar colocaciones de deuda que hace unos meses, los premios en los mercados dependen de la calidad crediticia de los gobiernos, que están presentando considerables presiones.

Sean Marion, analista internacional de finanzas públicas de Moody's Investors Service, afirmó que la calificación de estados y municipios en México se ubica entre la más alta, Baa1 (riesgo crediticio moderado), y la más baja, B1 (obligaciones especulativas, sujetas a un riesgo crediticio alto).

"Se tiene un rango bastante largo en calificaciones y la distancia entre la más alta y la más baja refleja diferencias en la capacidad de pago de esas entidades (...) Por el momento, estamos monitoreando las medidas que las entidades están tomando para salir de la fuerte presión que presentan", dijo Marion.

El especialista de la calificadora internacional precisó que "en la actualidad hay mucha presión sobre las finanzas públicas de México, por lo que la situación de los estados y municipios es de mucha presión.

"La tendencia en 2009 de la transparencia de estas entidades es negativa y, al mismo tiempo, hay presión sobre la recolección de ingresos propios y para llevar a cabo las medidas contracíclicas en términos de gasto de infraestructura u obra pública."

La firma internacional aseveró que por ahora no ha habido alguna revisión de calificación crediticia, porque en general se observa que las coberturas están sosteniendo rangos que permiten pagar el servicio de la deuda y están monitoreando al sector subnacional.

Pero, "dada la circunstancia actual y la situación de las finanzas de los estados y municipios, estamos poniendo un ojo sobre la evolución de la liquidez de las entidades y las acciones de tomar más deuda este año y los ajustes".

Difícil prueba

En los últimos tres años, los estados mexicanos han generado, en promedio, superávit operativos de entre 8.0 y 10 por ciento de sus ingresos operativos.

Sin embargo, Standard & Poor's espera que estos índices se deterioren en 2009 y 2010, debido a mayores gastos operativos y a los menores ingresos esperados.

"Aunque podrían tomar financiamiento bancario, sería costoso en las condiciones actuales, lo que podría afectar aún más el desempeño presupuestal de las entidades", constató la firma.

Para 2010, los gobiernos locales y regionales podrían enfrentar la prueba más difícil en muchos años respecto a las decisiones que tendrán que tomar para balancear sus presupuestos.

Daniela Brandazza, analista de la firma, mencionó que sigue siendo alto el grado de incertidumbre sobre la disponibilidad de recursos que puedan compensar una mayor reducción en las transferencias federales.