Recesión en México, la peor desde la Gran Depresión (El Financiero 24/08/09)

Isabel Becerril

Lunes, 24 de agosto de 2009

La recuperación no será rápida ni vigorosa, como después de 1995: CEESP.

· CRISIS, HISTÓRICA

La recesión que presenta México está encaminada a ser la peor que se haya experimentado desde la llamada Gran Depresión, que inició en el plano mundial a finales de 1929, advierte el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

También pronostica que el país no tendrá una recuperación inercial rápida como en los años siguientes a la crisis de finales de 1994, ya que las condiciones previas a la crisis han empeorado.

Ante ese panorama, insiste en la necesidad de profundizar los cambios estructurales que eleven el crecimiento potencial de la economía, y afirma que será responsabilidad del nuevo Congreso no aprobar reformas populistas que impidan desplegar este crecimiento.

Después de que se informara la caída anual del Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre del año de 10.3 por ciento, el CEESP señala que la "buena noticia" es que el ritmo de contracción trimestral se desaceleró significativamente.

El organismo que preside Luis Foncerrada explica que algunos indicadores mensuales, como el crecimiento de 6.7 por ciento de la producción de autos de junio a julio, han aumentado la evidencia que la economía tocó fondo para que inicie su repunte en la segunda mitad del año, reforzando la esperanza de que abandone la recesión en el tercer trimestre.

Preocupación

Sin embargo, señala que algo muy preocupante -además de la fuerte contracción productiva y del deterioro en las condiciones de vida de muchos mexicanos- es que las condiciones previas a la crisis han empeorado, lo que impedirá que la recuperación sea vigorosa.

Por un lado, persiste la dependencia a las importaciones que realiza Estados Unidos, donde una quinta parte de la economía está ligada a la producción manufacturera de exportación, anota.

Y por otra parte, la inestabilidad del sistema fiscal implica un faltante de recursos de 300 mil millones de pesos para 2010, por lo que el "shock financiero" resultará en un menor nivel de inversión pública si no se aprueba una reforma fiscal integral en el próximo periodo de sesiones del Congreso. Así, puntualizó, el debate debe centrarse en los cambios profundos que requieren la economía y el sistema político-jurídico, y no en propuestas de emergencia que no tendrán efectos visibles en la recuperación que ya muy probablemente inició.