En riesgo, las reformas estructurales: CEESP (El Financiero 06/04/10)

Isabel Becerril

Martes, 6 de abril de 2010

No se perciben buenas señales, dice.

Aún no hay consenso sobre los cambios fiscal y laboral.

Sector externo, el principal motor de la actividad productiva.

Ante el entorno favorable que se prevé en 2010 para la recuperación de la economía se corre el riesgo de postergar de nueva cuenta los cambios que necesita el país para tener un crecimiento sostenido, advierte el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

Pone énfasis en que el principal impulsor de la actividad productiva nacional vuelve a ser el sector externo, lo cual aumenta nuevamente la vulnerabilidad de la economía a sucesos en el exterior, especialmente el desempeño de la economía estadounidense, que según los especialistas crecerá 2.9 por ciento en 2010.

Va más allá al afirmar que no se perciben buenas señales en cuanto a la aprobación de las reformas estructurales, ya que aún no hay consenso sobre los cambios en materias fiscal y laboral.

El ambiente para este año parece no ser complicado, incluso, dado el ritmo al que se recupera la economía mundial, cabe la posibilidad de que México crezca más de lo que prevén los especialistas. No obstante, esto puede ser preocupante, toda vez que se puede generar un exceso de confianza y retrasar lo cambios que requiere el país para estimular el mercado interno y fortalecer el avance de la actividad económica en el mediano y largo plazos.

En su análisis semanal, el organismo que dirige Luis Foncerra destaca que la opinión de los especialistas del sector privado concuerda en que el principal factor que podría limitar el ritmo de la actividad económica es la ausencia de cambios estructurales en México.

Señala que es importante aprovechar el entorno en que la economía se recupera, pues de no hacerlo ahora se mantendrá un ritmo de crecimiento pobre y con un beneficio social limitado.

Ante las buenas expectativas, el pronóstico de crecimiento del Producto Interno Bruto para 2010 se elevó a 4.08 por ciento entre analistas del sector privado, después de que en el sondeo realizado en enero la expectativa era de 3.28.