Sacrifican crecimiento para controlar el déficit fiscal (El Financiero 03/06/10)

Marcela Ojeda Castilla

Jueves, 3 de junio de 2010

Gobierno limita la expansión del gasto: CEFP.

La política anticíclica afectará recuperación de la demanda agregada.

México, entrampado con bajos ingresos y un mal uso de recursos: E&Y.

· Paso lento del PIB por equilibrio fiscal

La política de gasto por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se está dirigiendo más a cuidar el cumplimiento del déficit público establecido para este año que a impulsar el crecimiento económico.

"Esa política mantiene a ultranza el objetivo del equilibrio fiscal, incluso a costa del crecimiento económico, y en la medida de lo posible contiene la expansión del gasto", advirtió el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) en un análisis del informe de la SHCP sobre las finanzas públicas al primer trimestre.

Precisó que de enero a marzo, el gasto neto presupuestario apenas creció 0.3 por ciento real anual, mientras el programable decreció 1.7 por ciento, y en este caso, montos similares o menores, con un flujo de ingresos públicos mayores, anticiparían una reducción en el déficit proyectado para el final del ejercicio.

Asimismo, indicó que se podría estar presentando una contención del gasto que apuntaría a disminuir en lo posible el déficit público, tal y como ocurrió en 2009, y que de ahí se infiere que la política anticíclica del gobierno ya ha sido acotada, lo que a la postre afectará la recuperación de la demanda agregada.

Cómo y en qué

Jonathan Heath, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo a EL FINANCIERO que cuidar el equilibrio fiscal y elevar el crecimiento económico no necesariamente son objetivos contrapuestos.

"Es muy importante proteger el déficit para no volver a caer en la situación de la década de los ochenta; evitar lo que se está viviendo en varios países de Europa, y si el gobierno federal quiere estimular el crecimiento, debe cuidar en qué y cómo gasta, no necesariamente cuánto", agregó Heath Constable.

Indicó que cuánto gastar lo marca precisamente la restricción presupuestal, y que sin ella quizás podríamos crecer un poco más, "pero en forma ficticia y por poco tiempo", por lo que todas las políticas para estimular el crecimiento, más bien deben radicar en el cómo y en el qué se gasta.

Hacienda atribuye el bajo crecimiento del gasto público tanto a la política contracíclica de 2009 -que supuso el adelanto del calendario de gasto e hizo una base de comparación para 2010 muy elevada- como al programa de austeridad y racionalidad.

Para los especialistas del CEFP, "ambos argumentos de Hacienda son parcialmente ciertos. El primero es válido en el caso de la inversión física, que en el primer trimestre de 2009 creció 81.8 por ciento anual y en el de 2010 disminuyó 3.5."

Para Carlos Cárdenas, vicepresidente de la firma Ernst&Young y del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), el problema de México no es propiamente de gasto, sino de falta de ingresos, lo cual se resolvería con las reformas que el país requiere.

"Es ahí donde estamos entrampados. Necesitamos generar los ingresos para entonces sí estimular la economía. Se debe mantener un equilibrio entre no exceder la disciplina presupuestal y no contener el gasto a tal grado que la economía se paralice."

Asimismo, subrayó que aun en un presupuesto equilibrado no se han ejercido todos los recursos como se debería, y apuntó que lo criticable es que el gobierno no está gastando todo el presupuesto conforme a lo autorizado, además de que no se conocen las razones para ello.