Fuga de cerebros, triste realidad de AL en ciencia y tecnología (El Financiero 07/06/10)

Fuga de cerebros, triste realidad de AL en ciencia y tecnología (El Financiero 07/06/10)

Marvella Colín

Lunes, 7 de junio de 2010

La región enfrenta dificultades para atraer inversiones hacia sectores de alta tecnología.

 

A más de dos décadas de que se liberaron los flujos de capitales directos en América Latina, persisten dificultades en la región para atraer inversiones hacia la alta tecnología e insertarse en los eslabones de elevado valor agregado, situación que tiende a obstaculizar un mayor desarrollo de la región.

 

Actualmente tres cuartas parte de la Inversión Extranjera Directa (IED) que se dirige al sector productivo manufacturero sigue concentrada en actividades de intensidad tecnológica baja, con el 21 por ciento de lo capitales, y media-baja con el 55 por ciento de los mismos.

 

Por el contrario, las inversiones destinadas a sectores de alta tecnología sólo representan el 8.0 por ciento y la canalizada a proyectos de investigación y desarrollo sigue siendo escasa.

 

En este entorno, la región aún enfrenta el desafío de fortalecer su capacidad de absorción de los beneficios de los flujos de capitales hacia ramas de alta tecnología.

 

No obstante, para ello se necesitan políticas de desarrollo productivo, centradas en la innovación y el fortalecimiento de las capacidades locales.

 

Lo anterior se desprende de información de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), organismo que considera que para este año la Inversión Extranjera Directa en Latinoamérica aumentará entre 40 y 50 por ciento, por lo que volverá a superar los 100 mil millones de dólares.

 

Ello en respuesta a las mejores perspectivas de crecimiento para los países de América Latina y el Caribe, las tendencias de largo plazo de la inversión extranjera hacia la región, y las previsiones de ingresos esperados en algunos de los mayores países receptores.

 

Sólo 2.0% para ciencia y tecnología

 

A pesar de que muchos países consideran que la inversión en ciencia y tecnología representa una puerta para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, América Latina se encuentra muy rezagada en este rubro, ya que apenas participa con el 2.0 por ciento mundial y de ese porcentaje el 1.6 por ciento lo efectúan Brasil y México. El resto de las naciones latinoamericanas contribuyen con 0.4 por ciento.

 

Así, América Latina sólo está por delante de África (con 0.3 por ciento), igual que Oceanía, y muy por detrás de Norteamérica (39 por ciento de inversión en ciencia y tecnología), de Europa (con 31 por ciento) y Asia con 26 por ciento.

 

Especialistas identifican como un rasgo común el hecho de que el sector privado es el punto débil de la investigación y desarrollo en la región, ya que se observa que la inversión en investigación y desarrollo del sector privado es en todos los países inferior a la inversión pública, en forma opuesta a lo que ocurre en las naciones industrializadas.

 

Así, mientras que ninguno de los países de América Latina destina más del 1.0 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) a dicha materia, de manera opuesta en naciones de otras regiones del mundo la inversión en investigación y desarrollo supera el 2.0 por ciento.

 

Además, a la baja inversión se agrega el hecho de la fuga de cerebros, ya que muchos científicos capacitados dejan América Latina en busca de mejores condiciones para desarrollar sus investigaciones, afectando con ello la consolidación de capacidades científicas en muchos países.