Difícil terreno para la inversión productiva en México (El Financiero 28/06/10)

Marvella Colín

Lunes, 28 de junio de 2010

La economía mexicana resiente uno de los mayores estragos sobre la actividad productiva al advertirse por cinco trimestres consecutivos una reducción en la inversión.

Ello evidencia una fuerte descapitalización en los diversos sectores económicos, por la desconfianza que genera entre los empresarios la incertidumbre en los mercados financieros mundiales y el retraso en la ejecución del gasto público.

Si bien la inversión fija ha atenuado su caída al observarse un declive de 1.2 por ciento en el primer trimestre de 2010, frente a la caída de 6.42 por ciento en igual periodo del año anterior, la cifra negativa actúa en contra de un crecimiento productivo sano.

En México la capacidad de inversión se ha visto fuertemente limitada no sólo por los acontecimientos mundiales, sino también por la falta de estímulo empresarial, la seguridad pública y altos gravámenes.

Prácticamente fue nulificada desde el cuarto trimestre de 2008, cuando reportó un avance de sólo 0.23 por ciento, y ya para el primer trimestre de 2009 cayó 6.4 por ciento, tocando fondo en el segundo trimestre de ese año con un desplome de 14.3 por ciento.

En el país, la Inversión Fija Bruta total reportó un descenso en promedio de 10 por ciento durante 2009, caída que difícilmente será revertida este año, ya que se calcula que el repunte podría ser de 2.4 por ciento anual.

Tal avance puede darse siempre y cuando la inversión fija presente un crecimiento en promedio de 3.0 por ciento en el segundo y tercer trimestres, y de 5.6 en los últimos tres meses del presente año.

Sin embargo, este escenario positivo podría verse empañado ante los temores de una recaída en la economía estadounidense y de los mercados mundiales.

Lo anterior se deriva de una investigación del área de Análisis de EL FINANCIERO, con base en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y del Banco de México.

Inversión más atractiva en el exterior

Ante la falta de condiciones propicias para la inversión en el mercado interno, en especial a raíz de la crisis del año pasado, se pudo observar cómo empresas mexicanas aumentaron cinco veces más sus flujos de inversiones productivas en el exterior durante 2009.

Así, ante el difícil clima de negocios en la economía mexicana, los empresarios del país decidieron elevar sus inversiones en el exterior, las cuales pasaron de mil 157 millones de dólares en 2008 a siete mil 598 millones en 2009. Ese monto es equivalente a dos terceras partes de la Inversión Extranjera Directa que México captó el año pasado.

Tal escenario podría repetirse, ya que frente al actual contexto internacional y doméstico, existe mucha incertidumbre en cuanto a que el mercado mexicano mejore para las empresas.

Casi una tercera parte de los especialistas del sector privado mexicano y extranjero considera que el clima de negocios seguirá igual de complicado y otros incluso advierten que empeorará.

En mayo pasado, 41 por ciento de los especialistas en economía, encuestados por el Banco de México, consideró que no estaba seguro que la coyuntura actual fuera propicia para invertir, lo cual denota mucha incertidumbre, pues en mayo del año pasado esa misma afirmación la hizo un 27 por ciento.