Grecia, el eslabón más débil del mundo (El Financiero 17/10/11)

Grecia, el eslabón más débil del mundo (El Financiero 17/10/11)

(Clara Zepeda Hurtado)

Lunes, 17 de octubre de 2011

Grecia no invitó a la fiesta y tiene una deuda pública que representa más de 150 por ciento del PIB, que debe de pagar tasas de interés que rondan 20 por ciento, con una economía en franca contracción, déficit fiscales muy abultados y furiosas protestas en las calles, por lo que la suspensión de pagos parece inevitable.

 

Diversos análisis han identificado que aproximadamente 80 mil millones de euros, equivalentes a 115 mil millones de dólares de deuda griega, están en manos de inversionistas extranjeros privados.

 

De éstos, 37 mil millones de euros están en manos de 34 grandes bancos europeos, que no están domiciliados en Grecia, y que es la parte que directamente afectaría al sistema financiero global.

 

El sistema financiero ha otorgado seguros contra el no pago de deuda griega, y ante ese evento las instituciones que emitieron los seguros también cargarían con pérdidas importantes.

 

Además, los bancos de Estados Unidos no están expuestos directamente a la deuda griega, pero sí a la deuda de los bancos europeos, por lo que si éstos tienen problemas de liquidez, también les afectaría.

 

Finalmente, el peor escenario es que, en el caso de una reestructura de la deuda griega, Irlanda, España, Italia y Portugal tendrían incentivos para tomar el mismo camino.

 

Recapitalización

 

Ante una posible ampliación de la quita griega y problemas de liquidez, la recapitalización parece una vez más la única escapatoria para el sector financiero, como se hizo hace tres años.

 

Aunque sin un plan sobre la mesa por parte de instituciones y gobiernos europeos, ya son muchas las voces de organismos y mandatarios que se han mostrado partidarias de una nueva reestructuración.

 

Los grandes bancos galos ya estaban advirtiendo de que la crisis griega les está poniendo en la cuerda floja. Société Générale y BNP Paribas, que han sufrido fuertes desplomes en las bolsas de valores, al caer en el año 48 y 32 por ciento, respectivamente. En su momento, ya significaron un costo para Francia de cuatro mil 250 millones de euros en conjunto.

 

El gobierno francés fue uno de los que más capital inyectó al sector en 2008 entre los países de la zona euro, sólo por detrás de las cantidades que aportaron Alemania y Holanda.

 

El costo total de recapitalizar a los bancos galos se tradujo en unos 24 mil millones de euros, según un informe que elaboró BNP Paribas.

 

Uno de los miedos ahora es que no se materialicen estas ayudas o al menos que los países no se pongan manos a la obra a tiempo.

 

Los avances en bolsa ante la promesa de Alemania y Francia de una posible nueva ronda de ayudas no son fiables y aún no hay, hasta la segunda semana de octubre, nada atado para evitar más caídas.