Cuba y su experiencia en aguas profundas (El Financiero 10/03/08)

Cuba y su experiencia en aguas profundas (El Financiero 10/03/08)

Esther Arzate

Lunes, 10 de marzo de 2008

La isla es deficitaria, tuvo que abrirse: expertos.

Permiten inversión de empresas privadas.

Corre la IP el riesgo de la exploración.

 

"Hasta la Cuba comunista ya abrió su industria petrolera a la inversión privada", es un argumento que, por las diferencias entre México y la isla caribeña, puede no tener mucho sustento al momento de hablar de una reforma energética.

 

Las historias política, económica y petrolera de ambos países no son comparables, de acuerdo con expertos, quienes señalan que la isla no tenía otra opción.

 

Expertos de la Asociación para el Estudio del Pico de Petróleo y Gas (Aspo México) dijeron que Cuba siempre ha sido deficitaria de petróleo y gas. Sus reservas actuales de hidrocarburos son de mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente (pce) y su producción de apenas 56 mil barriles al día, cuando consume al día 160 mil barriles.

 

México tiene 15 mil millones de barriles de pce, produce y exporta petróleo, con 3.1 millones de barriles al día y 1.6 millones de barriles al día, respectivamente.

 

Hasta 1991, Cuba recibía petróleo y gas de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en condiciones preferentes, pero con el cambio de régimen la isla se convirtió en un comprador más. Venezuela se convirtió en su principal proveedor petrolero, con unos cien mil barriles al día promedio.

 

El investigador de Energy Fellow en el Center for Hemispheric Policy de la Universidad de Miami, Jorge Piñón, dijo que el expresidente de Cuba, Fidel Castro, decidió impulsar la Revolución Energética luego de 2003, cuando trabajadores petroleros de Venezuela protagonizaron una huelga que derivó en un golpe de Estado, afectando el abasto de crudo a Cuba.

 

Cuba permitió la inversión privada en la empresa que había creado en la década de los noventa, CubaPetróleo (Cupet). Las canadienses Pebercan y Sherritt, en alianza con Cupet, son responsables de la producción actual de la isla.

 

Para tener acceso a los yacimientos del territorio marítimo cubano, el gobierno dividió su Zona Económica Exclusiva en el Golfo de México en 59 bloques, y ha concesionado 32 a petroleras privadas.

 

El Instituto Francés del Petróleo y el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) calculan en la Cuenca Norte de Cuba que los recursos de petróleo podrían ser de 4.6 mil millones de barriles y de 9.8 mil millones de pies cúbicos de gas natural.

 

Tienen concesiones la española Repsol, Sherritt, la india Oil and Natural Gas Corporation, la noruega Norsk Hydro ASA y Petronas, de Malasia, así como Petro Vietnam; otros cuatro bloques se negocian con la venezolana Pdvsa. En tierra y aguas someras también hay bloques disponibles, contratados por Sherritt, Pebercan y la china Sinopec.

 

El programa energético de Cuba concesiona los bloques y las petroleras hacen los estudios exploratorios y perforan. Si los yacimientos están secos la pérdida es de los privados y, si se confirman las reservas, éstos pueden recuperar su inversión dividiendo los recursos. Los porcentajes dependen del grado de riesgo que reconozca el gobierno cubano. En unos bloques la relación es de 60 por ciento de beneficio para la empresa privada y 40 para el gobierno, y en otros de 50-50 o 55-45 por ciento.

 

Cupet, la petrolera estatal, puede tomar una parte accionaria como socio activo con capital y riesgo en los proyectos o permanecer como socio pasivo.

 

Sin embargo, las empresas petroleras no han avanzado en los trabajos de exploración y perforación de pozos porque el bloqueo a Cuba les impediría comercializar los hidrocarburos en la zona, donde operan sobre todo compañías estadounidenses, dijo Piñón.