Poca respuesta internacional a la petición del FMI (El Financiero 20/01/12)

(Reuters) 

Viernes, 20 de enero de 2012

Reacción de apoyo sólo de pequeños contribuyentes.

Complacen a Europa las contribuciones de países del G-20.

Asia, en veremos; EU y Canadá dejan ver indisposición.

· POCO ENTUSIASMO ANTE LLAMADO DEL FMI

PARÍS, 19 de enero.- La petición del Fondo Monetario Internacional (FMI) para recaudar hasta 600 mil millones de dólares, con el fin de limitar las consecuencias de la crisis de deuda europea, generó palabras de apoyo en Bruselas, pero no hubo muchas en el resto del mundo que se apuraran por comprometer el dinero.

Hace dos años, el FMI ya había solicitado 500 mil millones de dólares para combatir la recesión global.

En esta semana, Christine Lagarde, directora gerente del FMI, recibió el aval del directorio ejecutivo para evaluar la suficiencia de los recursos del organismo.

El FMI consiguió una respuesta obviamente afectuosa de la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la Unión Europea en Bruselas, que instó a las potencias económicas del G-20 a acceder a la petición.

"Recibiríamos con agrado las contribuciones de países del G-20", manifestó el portavoz de la comisión, Amadeu Altafaj.

Añadió que "esto enviaría una señal muy clara al mercado para mejorar la capacidad del FMI de cumplir con sus responsabilidades sistémicas hacia todos sus miembros".

El pequeño estado de Omán, en el Golfo Pérsico, prometió participar e incluso duplicar su contribución que, según el jefe del banco central local, Hamood Sangour al-Zadjali, es "muy pequeña" en comparación a la de los países del Grupo de 20 potencias desarrolladas y emergentes (G-20).

Chile, otro pequeño aportante al FMI, dijo que estaba estudiando la posibilidad de colaborar con el FMI, pero no aseguró nada.

"Es un tema para la discusión corta en la agenda con el presidente (chileno, Sebastián Piñera) y antes de que él esté debidamente informado no quiero hacer ningún anuncio. Pero es algo que estamos estudiando", agregó el ministro de Hacienda de Chile, Felipe Larraín.

Sin compromisos

Pese a la respuesta de los pequeños contribuyentes y a las palabras de aliento desde Bruselas, las reacciones iniciales de las grandes potencias y mayores aportantes al FMI fuera de Europa resultaron débiles.

Japón y Corea del Sur dijeron que querían ver pasos decisivos de Europa para contener la crisis que se propagó desde Grecia hace casi dos años, remeciendo la confianza de los inversores y de los bancos.

"Estamos empezando a discutir sobre los recursos del Fondo en el directorio del FMI y en las reuniones del G-20; por supuesto que Japón no ha hecho ningún compromiso respecto a una contribución", comentó en Tokio un funcionario gubernamental bajo condición de anonimato.

China señaló que el FMI debería ser capaz de contar con el apoyo de países del G-20, pero no expresó ningún compromiso propio de entregar más dinero.

Afirmó que Beijing cumplirá con los compromisos previos del G-20 de asegurar que el FMI tenga fondos suficientes como para enfrentar la crisis financiera, pero no fue más allá de eso.

Las reacciones en Asia tuvieron lugar después de otras aún más frías emitidas el miércoles por Canadá y sobre todo por Estados Unidos, que está tan falto de dinero y endeudado como Europa desde la crisis financiera de 2008-2009.

"Seguimos creyendo que el FMI puede desempeñar un papel importante en Europa, pero sólo como un suplemento a los propios esfuerzos de Europa", declaró un portavoz del Tesoro estadounidense. "El FMI no puede sustituir a un robusto cortafuegos en la zona euro", añadió.

El gobernador del Banco de Canadá, Mark Carney, indicó que no está claro que los gobiernos europeos hayan hecho todo lo necesario para poder financiarse por sí mismos a tasas de interés sostenibles en los próximos años.

"Si tiene sentido mejorar los recursos del FMI, parecería que el foco principal debería ser lidiar con las consecuencias de la crisis europea para los inocentes", dijo Carney en una rueda de prensa en Ottawa.