Arabia Saudita: un país con el control energético (El Financiero 24/03/08)

Esther Arzate

Lunes, 24 de marzo de 2008

Ocupa el primer lugar en reservas probadas de crudo.

Produce nueve millones de barriles de crudo al día.

Empresa estatal realiza actividades de exploración.

Con una cuarta parte de las reservas probadas de petróleo en el mundo, el yacimiento más grande del planeta y una empresa petrolera 100 por ciento estatal, Arabia Saudita se ha consolidado como un país con dominancia en el mercado petrolero internacional.

En México las finanzas están petrolizadas porque dependen del 40 por ciento de los ingresos por la exportación de crudo, y en Arabia Saudita esa proporción es inmensamente mayor: en ese país el petróleo representa el 90 por ciento de las exportaciones, entre el 70 y 80 por ciento de los ingresos estatales, y el 44 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Arabia Saudita es el segundo país de mayor producción de petróleo, con un volumen de nueve millones 98 mil barriles al día en promedio (sólo es superado por Rusia), y ocupa el primer lugar en reservas probadas de petróleo, con 259 mil 800 millones de barriles, ya que cuenta con el yacimiento petrolero más grande del mundo, conocido como Ghawar (que aporta la mitad de la producción total del país y tiene reservas por 70 mil millones de barriles).

Ese yacimiento produce petróleo superligero, que es el de mejor calidad y precio, debido a que es menos complicado de refinarse que las otras calidades de crudo, como el ligero o el pesado.

Además del Ghawar, Arabia Saudita cuenta con los campos petroleros de aguas profundas más importantes del mundo (Safaniya, Khafji y Hout), con una estimación de 25 a 35 mil millones de barriles.

Gas natural

A su vez, la nación árabe ocupa el cuarto sitio entre los países con mayor volumen de reservas de gas natural con un volumen de 240 billones de pies cúbicos; y es el décimo productor de ese energético, con un promedio diario de cinco mil 737 millones de pies cúbicos.

Arabia Saudita ha mantenido su posición predominante, a pesar de que permanecen cerradas al 100 por ciento de propiedad extranjera actividades como la exploración y extracción de petróleo y la operación de oleoductos (ductos para el transporte de crudo).

Las empresas que dominan la economía de esa nación localizada en Medio Oriente son la Saudi Aramco, que tiene el monopolio de la exploración y extracción de petróleo y controla las reservas de petróleo del país, y la Saudi Basic Industries Corporation (Sabic), que es la séptima más grande productora de petroquímicos.

A pesar de contar con las reservas más grandes del mundo, Saudi Aramco tiene presencia en otros países, por lo que su producción de petróleo es de 11 millones de barriles al día, pero el año pasado invirtió 18 mil millones de dólares en un programa para aumentar la capacidad de producción y pretende alcanzar en 2009 un volumen de 12.5 millones de barriles al día y de 15 millones para 2020.

El año pasado la empresa estatal perforó 427 pozos en tierra y costa afuera, de los cuales 134 se localizaron en el campo Ghawar, 85 en el yacimiento Khurais y unos 50 en Khursaniya.

Esos proyectos fueron ejecutados con la intención de agregar capacidad de producción entre 6 y 8 por ciento anual para compensar la declinación natural de los campos, toda vez que el promedio total de agotamiento de éstos es de 29 por ciento, con Abqaiq (el más antiguo), con un 74 por ciento de agotamiento, el campo gigante de Ghawar con una tasa de 48 por ciento y el Shaybah con 5 por ciento de declive en su producción.

Refinación

La empresa tiene siete refinerías que operan con una capacidad total de 2.4 millones de barriles de petróleo al día, por lo que es la sexta compañía de refinación más grande del mundo.

En ese país la apertura al capital privado se ha limitado a permitir que las compañías otorguen servicios o que se asocien con otras compañías nacionales con un porcentaje mínimo de participación, por lo que el Estado obtiene el máximo beneficio de la industria petrolera nacional.

Para inversiones relacionadas con gas natural, la tasa impositiva es el 30 por ciento sobre las utilidades, mientras que en extracción de petróleo el impuesto es de 85 por ciento. Sin embargo, las posibles pérdidas se pueden trasladar al año siguiente para reducir la base tributaria. Para integrarse a la economía petrolera mundial, Arabia Saudita, mediante Saudi Aramco, mantiene convenios y asociaciones comerciales, en materia de refinación, con empresas transnacionales como Total, Conoco Phillips, Sumitomo Chemical, Exxon Mobil, Sinopec y Shell, por mencionar algunas.