Aumenta pobreza inflación alimenticia (El Reforma 21/04/08)

Para contener la tendencia, la CEPAL recomendó disminuir las alzas en los precios de los alimentos en los mercados internos y elevar los ingresos

REFORMA / Staff

Ciudad de México  (21 abril 2008).-   Una inflación alimenticia del 15 por ciento como la registrada en el 2007 creará al menos 10 millones de indigentes y otro tanto de pobres en Latinoamérica por año, estimó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

En un comunicado, la dependencia explicó que el año pasado, el promedio de inflación en la región fue del 15 por ciento, mientras que el incremento en el ingreso de los hogares fue de alrededor de un 5 por ciento.

La falta de relación entre ambos indicadores provoca que al menos 10 millones de personas al año simplemente pierdan su capacidad de pago, señaló la institución.

"Los altos precios de los alimentos vinieron para quedarse y no parecen obedecer a una situación transitoria", apuntó el texto.

El panorama se complica aún más por los efectos de los incrementos que están experimentando los combustibles que impactan las tarifas del transporte y de varios servicios públicos.

"Por lo tanto, resulta de la mayor prioridad poner en marcha y mantener políticas dirigidas a moderar esos efectos", indica.

Como medidas de contención, la CEPAL recomendó disminuir las alzas de los precios de los alimentos en los mercados internos, reduciendo aranceles e impuestos al consumo, así como procurar los ingresos de la población.

Para ello, los subsidios focalizados a ciertos sectores o aumentar los subsidios ya existentes, aparecen entre los posibles mecanismos.

El organismo exhortó a los países de alto y mediano ingreso a hacer aportaciones excepcionales a programas y organismos, como el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, que puedan llevar ayuda de emergencia a poblaciones en situación de riesgo.

En su Anuncio de Finanzas Públicas, el Banco de México reportó el viernes que modificará sus estimaciones de inflación para este año, que hasta el momento se ubican en 3.7 por ciento.

La razón es el alza en alimentos y energéticos, que ahora se combina con un incremento en los precios de otros productos, como consecuencia del traslado de nuevos impuestos al precio final de los productos.