El uso de tecnología ayudaría a ser autosuficientes en maíz (El Financiero 09/12/13)

Héctor A. Chávez Maya

Lunes, 9 de diciembre de 2013

La aplicación de la tecnología desarrollada por instituciones de investigación como el Inifap podría permitir que México fuera autosuficiente en la producción de algunos granos como el maíz en el corto plazo, consideró Froylan Avendaño, presidente de Protección de Cultivos, Ciencia y Tecnología (Procyt).

En entrevista, señaló que en México hace falta ligar los resultados de la investigación a un aspecto comercial, pues no se ha logrado encontrar esa unión, lo que provoca que muchos de los estudios se queden en los escritorios, premiando más la investigación per se que el resultado obtenido.

Para el presidente de Procyt, organismo que agrupa a empresas privadas de la Industria de la Ciencia de la Protección de los Cultivos en México, en el país se inhiben las inversiones de grandes empresas, debido a que hacen falta más esfuerzos de parte del gobierno para poder incentivar el desarrollo de las tecnologías.

Además, se requiere, dijo, desarrollar los laboratorios, campos de cultivo donde se puedan probar esta tecnologías, por lo que habrá que hacer más trabajo de organismos de investigación.

"El gobierno federal le ha dado más importancia a la problemática de corto plazo, como es el caso del crédito a pequeños productores, una alineación a los precios acorde a la demanda del mercado, y en parte a la conversión de tecnologías; sin embargo, no se están visualizando en el largo plazo con institutos de investigación".

Por otra parte, advirtió que el impuesto que se aplicará a partir del 2014 a los plaguicidas afectará a más de 3 millones de pequeños productores del país que podrían ver reducida su producción hasta en un 40 por ciento.

Pese a las afectaciones, aseguró que el Procyt continuará trabajando para generar tecnologías innovadoras que contribuyan a incrementar la producción y mejore la calidad de los alimentos en México.

Destacó que a nivel mundial se invierten 7 mil 300 millones de dólares al año para generar investigación y desarrollo, mientras que en México sólo se trabaja en la efectividad biológica para poder comprobar que esta tecnología se puede usar y aplicar en los ecosistemas del país.

"La mayoría de plantas las importamos desde diversa partes del mundo, son productos de primera calidad para México y estamos haciendo la labor de ayudar a los productores para reconocer las tecnologías y aplicarlas, estamos en un buen nivel de competitividad".

Consideró que el gobierno mexicano debe retomar las experiencias de países como Brasil con la Empresa Brasilera de Investigación Agropecuaria (Embrapa), que ha desarrollado programas con la Iniciativa Privada para captar recursos y generar tecnologías que le han permitido posesionarse como uno de los principales productores a nivel mundial.