Dejan cicatrices en el mercado laboral (Reforma 31/03/14)

 Por Alejandro Olivares

Monterrey México (31 marzo 2014).-   La dificultad que enfrentan los jóvenes para encontrar empleos de calidad y la situación de desempleo juvenil no sólo tienen un impacto en su bienestar, sino también afecta su futuro laboral.

El efecto scarring -o de cicatriz- en el mercado laboral se refiere al impacto que tiene el desempleo juvenil y la integración de los jóvenes a la informalidad en sus posibilidades futuras de empleo, por ejemplo en sus niveles salariales, explica Alejandro Villagómez, académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).

"Tiene un efecto negativo en términos de la acumulación de capital humano, de la experiencia y de capacitación para los jóvenes, que los pone en desventaja hacia futuro", agrega.

En México, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (2012), 59 por ciento de la población en edad productiva se encuentra en la informalidad, siendo los jóvenes de entre 15 y 24 años de los más concentrados en esta situación, pues 6 de cada 10 consiguen empleos informales.

Además, la tasa de desempleo juvenil, que es de 9.5 por ciento, se encuentra por encima de la media nacional (5.2 por ciento) según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

"Mientras más te la pasas en el desempleo menos probabilidad tienes de que te vayan a contratar y si te contratan, lo que te van a pagar es menor que si hubieras entrado a trabajar en un periodo más corto", señala Eduardo Rodríguez-Oreggia, profesor investigador de la EGAP del Tec de Monterrey.

Una de las razones principales que han hecho que la inserción al mercado laboral sea más complicada es el pobre crecimiento económico que ha tenido el País en los últimos años, indica Villagómez.

En el caso de los jóvenes, agrega, el hecho de que a la hora de pedir un empleo les exijan experiencia limita su entrada al mercado laboral, lo que los orilla a buscar la informalidad.

"Entonces no te contrataron de joven y te fuiste al mercado informal donde no tienes las mismas condiciones. Luego, aunque tú ya después no seas tan joven ya tienes algunos años en la informalidad por lo que tu carta de presentación para nuevos trabajos es de menor calidad que la de otro que sí tuvo esa oportunidad", explica.

Rodríguez-Oreggia añade que los jóvenes, cuando aún están estudiando o preparándose, buscan trabajos flexibles, lo que hace más complicado que sean empleados.

A medida que no haya un crecimiento económico acorde al demográfico, la inserción al mercado laboral seguirá siendo complicada para los jóvenes, precisa Villagómez.

"Esas condiciones terminan afectando de manera negativa a los jóvenes porque los empleos que se están generando van a ser para los que ya tienen experiencia en el mercado laboral", sentencia.

 Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo