Martes, 24 de junio de 2008

México se encuentra en una fase de diversificación de su comercio, después de que la concentración con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) le ha restado competitividad.

Esta situación es contraria a las ventajas comparativas obtenidas con el Tratado de Libre Comercio entre México y la Unión Europea (TLCUEM).

Así, mientras que las exportaciones mexicanas a los países de América del Norte crecieron en 2007 a una tasa de 5.8 por ciento anual, a las naciones de la Unión Europea alcanzaron una tasa de 32.2 por ciento.

Esta tendencia se acentuó en el primer trimestre de 2008, ya que las ventas externas a dicho bloque económico crecieron 55 por ciento, en tanto que las exportaciones a los países del TLCAN avanzaron sólo 12.8 por ciento.

La fortaleza del euro frente al peso ha jugado un papel central en esa diversificación del comercio mexicano, pues con una cotización de 16.8 pesos por euro al cierre del primer trimestre de 2008, la moneda nacional se depreció 13.9 por ciento anual. Mientras que en 2007, la pérdida para el peso respecto al euro fue de 11.63 por ciento.