Dificultan acceso a microcréditos (Reforma 07/11/16)

Por Jessika Becerra

Cd. de México México (07 noviembre 2016).-   Los microempresarios ubicados en zonas donde no hay bancos, prácticamente carecen de caminos para acceder al crédito formal.

Razones para que esto ocurra prácticamente se pueden resumir en dos: el fondeo se ha reducido y los bancos no están dispuestos a prestar su infraestructura al sector financiero popular, sostuvo Prodesarrollo.

Martín Celaya, vocal de esta red de 82 microfinancieras, acusó que FIRA, Financiera Nacional de Desarrollo, Pronafim, Fommur y Fifomi dan pocos créditos y sólo los otorgan a las financieras grandes y no a aquellas que operan directamente en las regiones más necesitadas de crédito.

La falta de fondeo generó que en el primer trimestre de 2016 se presentara una situación atípica. Por primera vez, desde que se contabiliza la actividad crediticia del sector, se redujo el crecimiento de la cartera.

Aunque la reducción fue sólo de 1.45 por ciento en el primer trimestre de 2016 respecto al trimestre previo, refleja las presiones del sector, aseguró Celaya.

"Por primera vez en 15 años, el microcrédito no crece en este País, porque las fuentes de fondeo naturales de este mercado se han visto frenadas, o las renovaciones de fondeadores naturales han entrado en letargos", mencionó el ex director de medios de pago de la Asociación de Bancos de México (ABM) y de Scotiabank.

"Es alarmante que por un lado digamos que queremos inclusión y que nos vamos a preocupar porque los recursos lleguen a quien más los necesita, y por el otro lado, no tengamos la sensibilidad de garantizar o asegurar que aquellas intermediarias que ya tiene los canales de acceso a la gente más desprotegida se les descapitalice".

Destacó que al fondear sólo a los grandes intermediarios, la banca de desarrollo ha comenzado a generar oligopolios.

"Es mas fácil colocar (recursos de fondeo) entre 10 (entidades) grandes y descapitalizar a 150 chiquitas que sí llegaban al cerro", agrega.

Por otra parte, recordó que los bancos no quieren abrir las 236 cuentas que les cerraron a clientes de 30 microfinancieras desde hace varios años, con lo cual los usuarios tienen que viajar de su municipio a otro para recibir y pagar sus créditos, y pagar más.

Al respecto, la ABM sostuvo que el cierre de cuentas obedece a que registran movimientos que no responden a las reglas de control de lavado de dinero.

Martín Celaya defendió que el promedio de depósitos que realizan sus usuarios son 4 pagos al mes de 500 pesos, ya que el promedio de préstamo entre los 15 millones de clientes que tienen las entidades incorporadas a Prodesarrollo es de 8 mil pesos.

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