Subsidios causan retraso en ajustes inflacionarios (El Financiero 07/08/08)

Marcela Ojeda Castilla

Jueves, 7 de agosto de 2008

Precios administrados distorsionan los cálculos del INPC: Banxico.

Aumentan los deslices en precios de combustibles: Elizondo.

Bajarán las presiones internacionales, pero aún faltan más ajustes.

Los subsidios en muchos de los precios que son "administrados" por el gobierno retrasan los ajustes que consumidores y productores deberían hacer frente al crecimiento en los costos de los energéticos, además de que distorsionan el cálculo del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).

Everardo Elizondo, subgobernador del Banco de México (Banxico), dijo que mientras más alto sea el subsidio sobre los energéticos, mayores serán las distorsiones.

Asimismo, negó que los recientes cambios en materia de política monetaria tengan que ver con una sobrerreacción.

"Pensamos que son exactamente los cambios que se necesitan, dado que conocemos los tiempos de rezago que hay entre las acciones de política monetaria y su impacto sobre la inflación, para eventualmente acercarnos a la meta de 3 por ciento allá por 2010", explicó.

Al participar en la conferencia "El Alza Internacional de Precios y su Impacto en la Economía Mexicana", organizada por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), destacó que el impacto de las materias primas energéticas en México tiene que ver con los bienes y servicios administrados.

"Hay carburantes que están sujetos en su precio a un desliz predeterminado, como es el caso de la gasolina y el gas LP.

"En la gasolina, el desliz mensual se ha modificado, de dos centavos por litro en enero a siete en julio, y en el caso del gas LP, el desliz era de tres centavos y ahora es de siete también.

"Como quiera, existe una brecha muy importante entre las cotizaciones internas y externas, tanto en la gasolina como en el diesel y el gas LP", reiteró Elizondo Almaguer.

Precisó que la brecha entre el precio de la gasolina en México y el estado de California (EU) es de 58 por ciento, mientras que en el caso del diesel es de hasta 120 por ciento.

"Estos son precios que en muchos casos están, entre comillas, administrados por el sector público, pero que por supuesto tienen como consecuencia no sólo un problema estadístico en la dirección comparativa de lo que está sucediendo, sino, lo que es mucho más importante, desde el punto de vista económico: retrasan los ajustes que los consumidores y los productores deberían hacer frente al crecimiento relativo de los energéticos. Sin embargo, es inevitable que eso suceda", destacó.

Mejor horizonte

El subgobernador del banco central apuntó que en el horizonte es más fácil prever que ocurran cambios en la dirección adecuada en el movimiento de los precios de los productos alimenticios, que en el ámbito de los energéticos.

"Eso puede ser que sea una pequeña nota positiva en lo que toca al futuro, pero no quisiera abundar mucho sobre las perspectivas, porque el problema con los pronósticos es que generalmente tiende uno a fallar, y hay quienes incluso se equivocan cuando examinan el pasado", aclaró.

Dijo que recientemente se han moderado los crecimientos de los precios spot en los mercados internacionales, y que hay una serie de cambios de precios a la baja que aparentemente están relacionados con la percepción de alguna disminución en el ritmo de crecimiento de la economía, no sólo en EU, sino en otros países.

"Al parecer aún quedan ajustes de precios en la tubería y es que una vez aumentados los costos, esas modificaciones todavía no han terminado por reflejarse en los precios de los productos finales.

"La incertidumbre es acerca de la velocidad de traspaso de los incrementos de costos que ya están en la tubería hacia los precios finales, pero eso dependerá de la fuerza con que todavía sigan creciendo las principales variables económicas de México", señaló.