Desigual distribución del ingreso en AL; alcanzó ya a la clase media (El Financiero 11/08/08)

Desigual distribución del ingreso en AL; alcanzó ya a la clase media (El Financiero 11/08/08)

Rocío Martínez

Lunes, 11 de agosto de 2008

En las naciones de la OCDE la clase media concentra el 67.05% del ingreso nacional.

 

Los problemas estructurales que arrastran las economías de América Latina han sido agravados por un contexto de alta concentración en el ingreso, lo que aumenta el rezago económico que no sólo afecta a la población más desfavorecida, sino también a la clase media de la región.

 

Lo anterior se observa en la participación que tiene la clase media dentro del Producto Interno Bruto (PIB), ya que el ingreso que concentra este segmento en los países que pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), asciende a 67.05 por ciento del ingreso total; en contraste, en América Latina la proporción es de 56.81 por ciento del PIB.

 

De acuerdo con el informe La clase media y el proceso de desarrollo, publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el ingreso que percibe la clase media en Latinoamérica se encuentra por debajo del promedio mundial, que es de 61.88 por ciento; inclusive se ubica detrás de los países de Medio Oriente y el norte de Africa, donde representa el 63.64 por ciento.

 

En la medida en que aumenta el nivel de desarrollo en un país, también crece el tamaño absoluto de la clase media, por lo que resulta necesario atender a un mercado más exigente que demanda bienes y servicios de mayor calidad, lo que estimula el avance económico.

 

Por todo lo anterior, se observa que la iniquidad limita el bienestar de la población en los países de América Latina. De esta manera, el ingreso per cápita en los países de la región se ubica en cinco mil 657.84 dólares, cifra que apenas representa el 20.49 por ciento del ingreso que obtiene cada persona en los países de la OCDE.

 

Pequeñas muy productivas

 

La clase media ocupa un papel preponderante en el desarrollo económico y político de las naciones, debido a que entre la población de dicho estrato económico existe una alta capacidad productiva que se refleja en el número de Pymes que crea, por lo que también se convierte en un sector clave para la creación de empleos.

 

No obstante, las pequeñas y medianas empresas tienen un peso diferenciado entre los países de alto ingreso y los de ingreso bajo y medio, como es el caso de los países latinoamericanos; así, en las naciones avanzadas las Pymes participan de mejor forma en la economía nacional.

 

En los países de la OCDE, las Pymes son una fuente importante en la generación de empleos y en la actividad económica, ya que concentran el 63.93 por ciento del personal ocupado, mientras que generan el 53.63 por ciento del PIB, lo cual refleja que se trata de pequeños establecimientos altamente productivos.

 

De manera contraria, en los países de América Latina, donde la desigualdad se mantiene como un factor adverso para el desarrollo, las Pymes proporcionan el 55.94 por ciento de los empleos, y en lo que se refiere a la generación de ingresos, apenas participan con el 45.34 por ciento del PIB.

 

Por otra parte, el organismo señaló que en este segmento de la población recae una alta proporción del consumo en los países, como resultado del mayor poder de compra que poseen.

 

Así, la clase media también actúa como un grupo que ayuda a mantener la estabilidad política, puesto que según datos, esta población es menos propensa a apoyar sistemas políticos de corte populista o autoritario.