En el olvido, la producción de café: Alfredo Moisés Ceja (El Financiero 08/09/08)

Héctor A. Chávez Maya

Lunes, 8 de septiembre de 2008

Nuestro país cayó del cuarto al octavo lugar mundial.

La cafeticultura en México ha sido abandonada tanto por la iniciativa privada como por el gobierno, lo cual ha ocasionado que en los últimos diez años el país haya pasado del cuarto al octavo lugar mundial, con una caída en su producción de 6.5 millones de sacos en 1998 a 3.4 en 2008.

Alfredo Moisés Ceja, presidente de la Asociación Mexicana de Productores Exportadores de Café, advirtió que las exportaciones de México a agosto del año pasado sumaron dos millones 440 mil sacos del aromático, y a igual mes de 2008 sólo ascendieron a dos millones 160 mil, una baja de 12 por ciento.

En entrevista con EL FINANCIERO señaló que a pesar de que en 1998 el país llegaba a obtener 980 millones de dólares por las exportaciones de café, actualmente está vendiendo al exterior sólo 220 millones.

"No es posible que en producción y exportación nos hayan rebasado Guatemala y Honduras; entonces vamos hacia abajo."

De ahí que es necesario hacer un análisis exhaustivo para saber si realmente se están aprovechando e invirtiendo los recursos de presupuesto para ayuda al café (1.5 millones de pesos en 2008), pues no se trata sólo de dinero, sino también de apoyos tecnológicos y capacitación para los productores.

"Nos falta una planeación cafetalera de largo plazo; nosotros lo venimos alegando y buscando muchos años atrás. Cada año nos cambian las reglas del juego, y eso no nos permite avanzar."

Ante el abandono de tierras cafetaleras y la falta de apoyos adecuados, en poco tiempo México podría disminuir la superficie de cultivo de 650 mil hectáreas según el padrón, a sólo 250 mil, al igual que el número de productores, que actualmente es de 470 mil.

Moisés Ceja criticó las juntas de la Asociación Mexicana de la Cadena Productiva del Café (Amecafé), donde productores y autoridades se han reunido desde hace diez años para encontrar una solución a la problemática del sector, pero seguirán siendo poco útiles si se sigue involucrando a líderes que sólo buscan dádivas y beneficios políticos.

Apoyos

La falta de productividad no se solucionará sólo con la renovación de cafetales. Es necesario darle seguimiento y que el gobierno apoye con suficientes técnicos, haciendo alianzas con ingenieros agrónomos que salen de universidades como la Chapingo y la Antonio Narro.

El descuido por parte del gobierno ha llegado a tal grado que se han reducido considerablemente los recursos destinados a la broca (plaga severa del café), de 150 millones de pesos en 2006 a 60 millones en 2008.

También hay que buscar mejores precios para los productores mexicanos, quienes este año por su cereza sólo están recibiendo 1.10 dólares por libra, cuando el costo de producción es de 1.40 dólares en promedio.

"El precio del café, que es un commodity muy variable, la semana pasada estaba en 142 dólares por cien libras; sin embargo, de un día a otro podría bajar hasta 135 dólares, generando grandes pérdidas a los productores."

Consideró que este problema se podría solucionarla con las coberturas de precios en el programa de Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Aserca), pero está mal manejado, ya que no se han dado las coberturas en tiempo, al igual que las demás ayudas.

Sería mejor la aplicación de apoyos de manera diferenciada y con base en la productividad, ya que esto haría menos dependiente a la gente, concluyó.