Pide Bush aprobar plan "extraurgente" (El Financiero 22/09/08)

Pide Bush aprobar plan "extraurgente" (El Financiero 22/09/08)

Clara Zepeda Hurtado / Agencias

Lunes, 22 de septiembre de 2008

Solicitan un "baño" de dinero público por 700 mil mdd al sistema financiero.

La crisis costará más de un billón de dólares a los contribuyentes de EU.

Demócratas y republicanos discuten la propuesta del gobierno en el Congreso.

 

Para evitar el colapso del sistema financiero estadounidense, Wall Street recibirá un "baño" de dinero público. El gobierno de George W. Bush envió al Congreso un plan de rescate a gran escala, en calidad de aprobación "extraurgente", que dejará una factura cercana a los 700 mil millones de dólares.

 

Con este capital, el Departamento del Tesoro solicitó facultades más amplias para comprar activos a las instituciones financieras estadounidenses y al resto de la economía de ese país, mediante la conformación de una nueva entidad.

 

La administración de Bush dio detalle de la que ya es la mayor intervención de un gobierno en la economía, obligado por una espiral que a punto estuvo de llevarse al sistema por delante.

 

"Se actuó para evitar el descalabro total", explicó el presidente estadounidense para justificar el cambio de estrategia de un Ejecutivo teóricamente poco dado a meter mano en los mercados.

 

El gobierno quiere que el plan sea sencillo, en parte porque desea la flexibilidad para ajustar lo que está haciendo a medida que cambien las condiciones del mercado.

 

Demócratas y republicanos discuten lo que el gobierno pide, que es la autoridad para contratar a gestores que supervisen la compra de activos.

 

Sin embargo, este documento, de apenas dos páginas, podría irritar al Congreso, que ya está expresando su preocupación con el plan.

 

Además, podría darles la oportunidad de incluir en la ley otras cláusulas, como más ayuda para aquellos que están perdiendo sus casas.

 

La propuesta le daría al secretario del Tesoro, Henry Paulson, una significativa libertad de acción para comprar, vender y acumular hipotecas residenciales o comerciales, así como cualquier valor, obligación u otro instrumento que esté basado o relacionado con tales hipotecas.

 

Los legisladores republicanos apoyaron la iniciativa de George W. Bush, mientras que los demócratas dicen que deja importantes preguntas sin contestar y que necesita trabajo.

 

Mecanismos de mercado

 

El precio de los activos hipotecarios en problemas, cuyo valor se ha derrumbado en la peor caída del sector inmobiliario de Estados Unidos en décadas, se determinará mediante mecanismos de mercado donde sea posible, tal como subastas en reversa.

 

En una subasta común, el vendedor pide un precio de base y la puja lo va elevando. En una subasta en reversa, el comprador -el gobierno de Estados Unidos- dice un precio y el vendedor decide si lo acepta o no.

 

La información del Departamento del Tesoro sobre el proyecto no especifica qué tipo de instituciones financieras califican para el rescate, pero parece abrir la puerta a firmas extranjeras.

 

La única limitación sería que las compras no podrían exceder los 700 mil millones.

 

Esa cifra se compara con los 515 mil millones que el presidente George W. Bush incluyó en el presupuesto para el año fiscal 2009 para el Departamento de Defensa.

 

El plan también prevé un incremento en el límite de la deuda pública, que se elevaría a 11.3 billones de dólares.

 

El Congreso ya aprobó un incremento de ese límite de deuda este año a 10.6 billones, como parte del paquete de leyes inmobiliarias que incluía el otorgamiento de facultades más amplias sobre los gigantes hipotecarios Fannie Mae y Freddie Mac. Desde entonces, las dos firmas han quedado bajo el control estatal.

 

El costo total de la crisis para los contribuyentes superaría con creces el billón de dólares, si al nuevo plan de salvación se le suman los numerosos rescates bancarios practicados hasta ahora y el paquete de estímulo fiscal aprobado por el Ejecutivo estadounidense.

 

Sólo esos 700 mil millones suponen más de las tres cuartas partes del Producto Interno Bruto (PIB) mexicano y, aproximadamente, el costo de dos años de guerra en Irak.

 

El secretario del Tesoro indicó que no tiene intenciones de beneficiar a los fondos de inversiones de riesgo hedge funds con el plan de rescate de 700 mil millones de dólares que está en negociaciones.