Hay focos rojos en comercio exterior: Lorenza Martínez (El Financiero 13/10/08)

Isabel Becerril / enviada

Lunes, 13 de octubre de 2008

Se deteriora la competitividad del sector.

Quiebra de empresas preocupa a Economía.

Necesario, acelerar la mejora regulatoria.

PUERTO VALLARTA, Jal., 12 de octubre.- México es uno de los países más abiertos del mundo, pero su crecimiento está por abajo de los resultados que debería tener con la apertura.

Lorenza Martínez Trigueros, subsecretaria de Industria y Comercio de la SE, también alertó que en México se han encendido los focos rojos en materia de competitividad en el comercio exterior.

Pero eso no es lo único que preocupa al interior de la Secretaría de Economía (SE), sino también el tema de las quiebras, "porque es terrible que empresas productivas, por no tener acceso a financiamiento, se vayan a la quiebra".

De ahí que habrá un incremento de los recursos del fondo de garantías que opera la SE, para aquellas empresas que son productivas pero que no tienen acceso a créditos, por el recelo que en estos momentos muestran los bancos debido a la crisis que padece Estados Unidos.

Refirió que hace unos días en el Índice de Competitividad del Foro Económico Mundial (WEF), en materia de comercio exterior nuestro país se ubicó en la posición 105 de 134 países, debido a las dificultades que presenta en este rubro.

Por ello, y ante una posible recesión global, de la que advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI), la tarea de desregulación y disminución de trámites en México cobra carácter de urgente.

Programas obsoletos

En su primer encuentro con los empresarios del ensamble y bajo el escrutinio de Rocío Ruiz Chávez, hoy asesora personal del titular de la SE, Gerardo Ruiz Mateos, Lorenza Martínez aseguró que muchos de los programas creados en los ochenta para facilitar el comercio exterior, ahora ya no responden a las necesidades del país.

Citó como ejemplo el caso de la industria manufacturera, en cuyos procesos 9 por ciento de los artículos que utiliza son traídos del extranjero bajo la tarifa general; 80 por ciento, sin pago de impuestos por los beneficios que otorgan los tratados de libre comercio signados por nuestro país, y el resto entran bajo un programa de excepción.

El problema no radica en el tipo de adquisición del exterior y bajo qué figura arriban a territorio nacional, sino en el hecho de que 90 por ciento de las importaciones deben cumplir con los mismos requisitos que entran bajo la tarifa general.

La pregunta es: ¿qué tanto conviene tener tantos programas para el 9 por ciento de productos que entran con tarifa general; "lo único que se está provocando es complicar lo que antes era una excepción".

Martínez Trigueros expuso que en el crecimiento de las exportaciones manufactureras con mayor valor agregado el país va en una tendencia adecuada, pero "tenemos la preocupación porque no van al ritmo que quisiéramos o que podríamos".

Además, señaló, una de las limitantes de la competitividad en México se encuentra en el comercio exterior.

En la actualidad en el país se tiene una "gran cantidad" de programas enfocados a beneficiar al sector exportador, pero a hora muchos de esos mecanismos -que en su momento fueron positivos porque ayudaron a esta actividad a incrementar su productividad- están haciendo muy complicada la administración tanto para los empresarios como para el gobierno.