Resurge el FMI como agente financiero estabilizador; inician naciones emergentes cartas de intención

Resurge el FMI como agente financiero estabilizador; inician naciones emergentes cartas de intención  (El Financiero 30/10/08)

Rocío Martínez

Jueves, 30 de octubre de 2008

Reservas, factor vulnerable; para México se reportan siete mil 776 mdd por debajo del nivel óptimo.

 

 RESERVAS, A LA BAJA

Ante la profundización de la crisis financiera mundial, agudizada en el último mes, algunos países emergentes han empezado a mostrar señales de choques exógenos en el balance de sus cuentas, situación que hace resurgir las cartas de intención que comprometen a los países prestatarios ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).

 

Desde el inicio de octubre, esta institución financiera ha realizado negociaciones con países emergentes para abastecerlos de recursos ante la agudización de la crisis, que puede convertirse en un peligro por el bajo monto de reservas internacionales que poseen.

 

De acuerdo con información del organismo, se observa que hasta agosto pasado, las reservas internacionales en Islandia apenas sumaron un monto por tres mil 703 millones de dólares, mientras que en Paquistán el saldo se colocó en cinco mil 700 millones de dólares.

 

Hungría y Ucrania obtuvieron los mayores montos de recursos por parte del Fondo Monetario Internacional; pero cabe señalar que en estas naciones el monto de reservas también es bajo; al cierre de septiembre, Hungría apenas sumaba 24 mil 900 millones de dólares, mientras que Ucrania acumulaba 37 mil 530 millones de dólares a igual mes.

 

A pesar de que la acumulación de divisas mantuvo un ritmo ascendente durante el año, la turbulencia financiera provocó que las autoridades del Banco Central mexicano realizaran subastas de dólares diarias, lo que generó una reducción en el saldo, que finalizó en 76 mil 571 millones de dólares en esta semana.

 

Este monto de reservas coloca a México en una situación de vulnerabilidad en lo que respecta a las cuentas externas, ya que el FMI establece que el monto acumulado por este concepto debe garantizar al menos tres meses de importaciones para mantener una condición de estabilidad ante el exterior.

 

Así, las reservas internacionales que posee nuestro país resultan inferiores en siete mil 767 millones de dólares al monto óptimo, que hasta agosto deberían ascender a 84 mil 338 millones de dólares.

 

En Latinoamérica, Brasil es la nación con el mayor saldo de divisas, con más de 205 mil 500 millones de dólares en sus arcas a septiembre del presente año. Mientras que Argentina y Chile se colocan con la menor cantidad de reservas internacionales, con 45 mil 500 y 24 mil 200 millones de dólares, respectivamente.

 

Resurgen préstamos del FMI

 

Una de las funciones medulares del FMI se centra en suministrar financiamiento a los países afectados por problemas de balanza de pagos, además de evitar o, en su defecto, corregir situaciones de crisis en los sistemas monetarios.

 

Los préstamos son realizados bajo el compromiso de que estas economías aplicarán una disciplinada política económica que evite incurrir en déficit en sus cuentas externas.

 

Para cumplir con esta finalidad, el organismo internacional cuenta con 209 mil 500 millones de dólares para financiar a 180 países afiliados.

 

De este gran total, fueron prestados 16 mil 100 millones de dólares a 64 países que se encuentran en un proceso pendiente de reembolso, mientras que seis mil 500 millones de dólares fueron prestados a 56 naciones en condiciones concesionarias.

 

Vuelven problemas de cuenta corriente

 

La recesión económica en el mundo, aunada a la caída en el precio de las materias primas durante los últimos meses, ha generado un desequilibrio en la balanza de cuenta corriente de muchas naciones emergentes.

 

Así, se observa que la crisis financiera que sacude a los mercados mundiales ha provocado que el Fondo Monetario Internacional recobre el papel que lo coloca como un organismo multinacional de estabilización para las economías emergentes, siendo los países de Asia y Europa los que han recurrido a estos créditos, rompiendo con el estigma que cargaban las naciones latinoamericanas.

 

En Islandia, el desequilibrio de la balanza de pagos alcanzó niveles preocupantes, puesto que al segundo trimestre del presente año representó el 14.6 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), al arrojar un déficit por cuatro mil 500 millones de dólares, situación que orilló a esta nación europea a solicitar recursos del organismo.

 

En el caso de Paquistán, el saldo negativo de su cuenta corriente ascendió a 7.2 por ciento del PIB, mientras que en Hungría equivale a 5.5 por ciento de su Producto.

 

Como resultado de los compromisos que han tenido que adoptar los países latinoamericanos ante el FMI para la obtención de créditos, ha generado que mantengan una estricta disciplina tanto en la balanza de pagos como en las cuentas gubernamentales durante largo tiempo.

 

Brasil y México presentaron un pequeño déficit en su balanza de pagos, que amenaza con ampliarse en los próximos meses, los cuales alcanzan 0.8 y 1.6 por ciento de su Producto Interno Bruto, respectivamente.