Enfrenta la banca en América Latina tiempos difíciles (El Financiero 18/11/08)

Ari Audi

Martes, 18 de noviembre de 2008

La perspectiva crediticia de Moody's Investors Service para los principales sistemas bancarios de Latinoamérica es negativa.

En un reporte, Celina Vansetti, vicepresidenta senior de la calificadora, atribuyó la postura de la agencia principalmente al escenario de una desaceleración económica potencial en el mundo, así como al proceso de desapalancamiento.

"Enfatizamos que tal expectativa no proyecta alzas en las calificaciones contra bajas", ya que el informe concluyó que la mayoría de los bancos están bien posicionados para encarar a las condiciones de turbulencia.

El rango promedio de calificaciones que Moody's tiene para las instituciones financieras latinoamericanas es de "C-", lo que sugiere firmeza.

"Por supuesto que el entorno económico menos benigno que estamos experimentando hará que sea muy difícil que bancos latinoamericanos sostengan el crecimiento registrado en años previos, para preservar su salud financiera", reconoció Moody's.

Además, en la región los sistemas bancarios están enfrentando una restricción significativa de liquidez, en dólares y en su divisa local, aparte de que un ambiente crediticio más complicado exacerbará los efectos de la falta de liquidez en las economías de América Latina.

Margen de maniobra

"En respuesta a las amenazas del desapalancamiento global, hemos sido testigos de medidas firmes y expeditas en la región para brindar flexibilidad financiera a sus mercados. Las autoridades en toda la región parecen tener amplias opciones que pudieran ser utilizadas", dijo.

Moody's señaló que los sistemas bancarios de esta zona geográfica se han beneficiado de varios años de rentabilidad de calidad, que a su vez les ha permitido preservar capital y acumular reservas.

De acuerdo con el informe, la estricta vigilancia por parte de las autoridades bancarias ha alejado a esos sistemas de los problemas de insolvencia.

"A diferencia de sus similares en mercados emergentes, los bancos latinoamericanos están invertidos y fondeados predominantemente en sus propios mercados y en sus propias monedas", describió.

Como consecuencia, la analista dijo que las oportunidades de negocios ofrecidas por sus sucursales domésticas significan que sólo hay exposición limitada a activos emproblemados, además de que los bancos de la región no dependen del financiamiento en divisas foráneas.

No obstante, Vansetti advirtió que si bien hay condiciones de crecimiento en los mercados locales, los bancos aún siguen expuestos a condiciones volátiles de fondeo y deterioro potencial de activos, particularmente porque las economías latinoamericanas sufrirán un deterioro en 2009.