Costo de insumos asfixia a productores agrícolas (El Financiero 01/12/08)

Héctor A. Chávez Maya

Lunes, 1 de diciembre de 2008

Aumenta 100% el precio de fertilizantes.

Mientras los precios de los productos agrícolas continúan a la baja en el mercado internacional, los productores mexicanos enfrentan el problema de producir con altos costos debido a que los insumos que utilizan para las siembras se mantienen caros.

En los últimos meses, dos de los principales insumos que requieren los productores para sacar adelante su actividad se han incrementado hasta 100 por ciento, como los fertilizantes que ahora se venden hasta en 12 mil 500 pesos, cuando en mayo de 2007 su precio era de sólo seis mil 500.

Asimismo, una de las variedades de la semilla para maíz, que en enero de 2007 se vendía en mil 375 pesos, ahora se compra hasta en mil 758, por lo que los productores que confiaban en que los precios de los productos se mantuvieran, se han quedado sin la oportunidad de ser beneficiados.

Al respecto, Víctor Suárez, director de la Asociación Nacional de Productores Agrícolas (ANEC), aseguró que los únicos beneficiados con la crisis mundial alimentaria han sido los productores de semillas como Monsanto, ya que en los últimos años la semilla se ha incrementado sustancialmente. De esta forma, explicó, con el aumento de precios como el del maíz los beneficios son limitados, pues las ventas de la siembra están concentradas en pocas empresas.

Los beneficiarios

Por su parte, Javier López Macías, presidente de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social (Unimoss), señaló que los productores lograron ingresos 30 por ciento superiores a los del año pasado, cuando inició la escalada de precios en el mundo; sin embargo, con el paso de los días los verdaderamente beneficiados resultaron ser los distribuidores.

El incremento de los insumos, advirtió, hará prácticamente imposible obtener altos rendimientos en los diferentes productos agrícolas del país. Lamentó que mientras en el mercado internacional el saco de semilla se cotizaba entre 60 y 85 dólares, en México se ubicó arriba de 130 como consecuencia de la especulación.

Consideró que las razones del alto precio en las semillas es porque los comercializadores buscan tener altos porcentajes de ganancia, además de que gastan cantidades impresionantes en la promoción o mercadotecnia, que al final se refleja en el precio de este insumo.

Como consecuencia de los altos costos de la semilla a escala nacional, sólo entre 15 y 22 por ciento de los productores mexicanos utilizan semilla mejorada, que les permite tener mejores rendimientos, como lo hacen en el estado de Sinaloa, que sin necesidad de utilizar semillas transgénicas alcanzan rendimientos de hasta 17 toneladas de maíz por hectárea.

Contrario a ello, en México aún hay comunidades que deciden sembrar con semillas de dudosa calidad y origen, pues tienen costos bastante más baratos que las semillas que cumplen con todas las normas; sin embargo, los resultados de las cosechas son poco aceptables, ya que sólo levantan en promedio 1.5 toneladas por hectárea, lo que no les permite obtener productos para venta, sino sólo para subsistencia.

En básicos casi toda la semilla se produce en el país; en hortalizas se importa 85 por ciento, debido a que requieren de tecnología muy especializada. Esas compras provienen, en porcentaje superior a 80 por ciento, de Estados Unidos y Europa.