Se agudiza la problemática en maíz, frijol y leche (El Financiero 05/01/09)

Héctor A. Chávez Maya

Lunes, 5 de enero de 2009

Altos costos de los insumos asfixian a productores.

La situación de los productores de maíz, frijol y leche a un año de la apertura total de las fronteras como consecuencia de la entrada en vigor del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) es cada día más delicada, afirmaron dirigentes rurales.

Coincidieron en que las autoridades mexicanas "ni siquiera saben lo que necesitamos en el campo", por lo que los problemas se han agudizado y podrían crecer aún más si no se toma una acción inmediata, "no de largo ni de mediano plazo sino de ya".

Efraín García Bello, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM), aseguró que a pesar de que el clima ha sido favorable y se obtuvieron más de 23 millones de toneladas del grano en 2008 -lo que garantizó el abasto para la industria molinera y harinera-, los campesinos enfrentan un grave problema con los altos precios de los insumos.

Prueba de ello es que en el ciclo primavera-verano tuvieron que adquirir fertilizantes muy caros, mientras que el precio de la tonelada de maíz bajó de tres mil 600 a mil 650 pesos.

Esto le generó al productor un grave problema de rentabilidad, por lo que ya solicitaron apoyo del gobierno, pero aún no tienen respuesta.

"Son situaciones que empiezan por el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte), donde nos sueltan completamente a la fuerza del mercado, pero no tenemos ninguna de las acciones que hemos propuesto, como la reserva estratégica y la compra consolidada de insumos."

García Bello lamentó que el gobierno haga anuncios espectaculares de programas de apoyo como el de Fertiliza, ya que a la fecha en el centro y sur-sureste del país no ha bajado ni un solo bulto de fertilizante mediante ese plan.

Escaso apoyo

Por su parte, José Antonio Rico, representante del Sistema-Producto Leche, aseguró que el sector ha sido afectado por el TLCAN no sólo porque ha permitido la entrada del alimento libre de arancel de Estados Unidos, sino de otros países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC), como Nueva Zelanda, que tan sólo hasta octubre de 2008 había ingresado a México ocho mil toneladas del lácteo en polvo.

Señaló que la situación es tan grave que hasta antes de 1994 los lecheros recibían 60 por ciento de lo que pagaba el consumidor por litro del básico, y actualmente es 40 por ciento, a pesar de que los costos de producción rebasan los 4.60 pesos.

Lejos de apoyar a los productores mexicanos, el gobierno ha aplicado prácticas de comercio que no corresponden a lo que estaba ocurriendo en el mercado internacional en 2007 y 2008, cuando los altos precios nunca favorecieron a los nacionales.

"Hubo una contracción de precios por parte de las industrias de lácteos tanto privada como social, ingresó leche entera en polvo en 6.50 pesos el litro; sin embargo, a los productores mexicanos nos la pagaron entre 4.5 y cinco pesos, dependiendo de la zona."

En el caso del frijol no es distinto, ya que en 2007 el costo de producción por hectárea era de 14 mil pesos, y en 2008 se incrementó en 39 por ciento, invirtiendo hasta 20 mil pesos.