La recesión ya llegó a México y permanecerá en todo 2009 (El Financiero 28/01/09)

La recesión ya llegó a México y permanecerá en todo 2009 (El Financiero 28/01/09)

Marcela Ojeda Castilla

Miércoles, 28 de enero de 2009

Prevé Banxico una caída del PIB de hasta 1.8% y 340 mil empleos menos.

Son políticas monetaria y fiscal insuficientes para lograr crecimiento.

Será inflación menor a 4%; no descarta presión del tipo de cambio.

 

· México, en plena recesión: Banxico

Es oficial, la recesión ya está en México y permanecerá durante todo 2009.

 

Para el Banco de México (Banxico), en el último trimestre de 2008, el Producto Interno Bruto (PIB) habrá registrado una caída de 1.0 por ciento y este año decrecerá entre 0.8 y 1.8 por ciento.

 

"Evidentemente, al estar esperando una contracción económica, esto corresponde a cualquier definición de recesión", afirmó el gobernador del instituto central, Guillermo Ortiz Martínez.

 

En conferencia de prensa para presentar el informe de inflación octubre-diciembre 2008 y el Programa Monetario 2009, destacó que, por lo general, el Banxico da un rango de 0.5 por ciento en sus estimaciones del PIB, pero ante el grado de incertidumbre a escala mundial, en esta ocasión lo amplió a 1.0 por ciento.

 

"Esperamos que hacia finales de año ya veamos una variación en el margen de la actividad económica, que nos va a ir indicando que ya salimos de la parte más recesiva del ciclo", agregó.

 

En materia de empleo, expuso que en 2008 se perdieron 37 mil 500 plazas formales respecto al dato de 2007 y que al cierre de 2009, el número de trabajadores formales que podrían quedar desempleados es de entre 160 mil y 340 mil.

 

En cuanto a la inflación general, anticipó que el rango más alto durante 2009 podría registrarse al cierre del primer trimestre, con un orden de entre 5.75 y 6.25 por ciento, desde un rango de 5.25 y 5.75 por ciento proyectado en el informe de inflación julio-septiembre 2008.

 

"Pero estamos estimando que en diciembre de 2009 la inflación estará abajo de 4.0 por ciento, y que vamos a converger en 2010 hacia el objetivo de 3.0 por ciento", agregó Ortiz Martínez.

 

Sin embargo, también aclaró que la materialización de esta trayectoria está sujeta a diversos riesgos, tanto al alza como a la baja.

 

Al respecto, el informe revela que el tipo de cambio se ha depreciado de manera importante, en un contexto donde la actividad económica se ha desacelerado considerablemente, lo que implica mayor incertidumbre respecto al posible traspaso del movimiento cambiario hacia los precios al consumidor.

 

"El efecto que sobre los precios podría tener la importante depreciación en el tipo de cambio es incierto. Esta depreciación ha sido mayor a las que hemos tenido de 2000 a 2007, de manera que es incierto el impacto que esto pueda tener.

 

"Sin embargo, pensamos que la inflación se va a comportar de acuerdo con la trayectoria presentada", apuntó Guillermo Ortiz.

 

Subrayó que la fase cíclica de la economía constituye un factor importante, pues en la medida en que la economía se esté contrayendo, habrá menores presiones de demanda y, por ende, sobre la inflación. También aclaró que no es un escenario imposible que haya nuevas alzas en los precios de las materias primas.

 

Por otra parte, señaló que para 2009 se espera un déficit de la cuenta corriente de entre 2.6 y 2.8 por ciento del PIB, contra 1.4 por ciento en 2008, pero precisó que no se anticipan dificultades para financiarlo, porque a ello contribuirán los recursos que ingresarán por concepto de las coberturas petroleras.

 

Faltan reformas

 

En su exposición, Guillermo Ortiz indicó que la respuesta de las autoridades ha sido una política fiscal expansiva y un relajamiento monetario, cuyos objetivos son estimular la demanda agregada, pero insuficientes para crecer de manera sostenida, por lo que es necesario profundizar en el cambio estructural en México.

 

Asimismo, señaló que a pesar de las intervenciones en el mercado cambiario, hoy nuestra reserva internacional es más alta que la de hace un año, y "estamos en posibilidad de reaccionar desde el punto de vista de las políticas monetaria y fiscal de una manera totalmente distinta a la de las crisis anteriores.

 

"En la medida de lo posible, las acciones tomadas tanto por parte de la autoridad fiscal como de la autoridad monetaria tendrán el efecto de mitigar los aspectos más agudos de esta crisis", apuntó.