Ofrecen hectáreas para maíz transgénico (El Reforma 26/03/09)

Ofrecen hectáreas para maíz transgénico (El Reforma 26/03/09)

El presidente de la Fundación Produce Tamaulipas dijo que su inquietud es que lo que se siembre experimentalmente no se destruya

 

Verónica Martínez

  

Ciudad de México  (26 marzo 2009).-   Apenas hace dos semanas se permitió la siembra experimental de maíz transgénico y los productores de Chihuahua, Durango y Tamaulipas, ofrecieron 100 mil hectáreas para que las empresas semilleras y centros de investigación realicen pruebas.

 

Representantes de los productores agrícolas de estas entidades afirmaron que están dispuestos a donar sus tierras para la experimentación.

 

Jamie Sánchez Ruelas, presidente de la Fundación Produce Tamaulipas (órgano independiente que agrupa a los agricultores de cada estado), comentó que en esta entidad 2 mil productores ofrecen 50 mil hectáreas.

 

"Nuestra petición es que la experimentación se haga como el algodón, donde hoy hay 100 mil hectáreas sembradas con semilla genéticamente modificada", afirmó.

 

La superficie, aclaró, pertenece a 2 mil productores que siembran maíz amarillo y lo tienen contratado con almidoneras como CPI, Almex, Lala, entre otras, las que les pagan en promedio 178 dólares por cada tonelada.

 

"Nuestra inquietud es que lo que se siembre experimentalmente no se destruya. Ya se han acercado empresas semilleras como Pioneer, Monsanto y Dow para empezar la siembra, podríamos hablar de una renta de tierra, pero las podríamos donar si se da como el algodón", dijo.

 

En ello coincidió Rubén Chávez, presidente del Consejo Nacional Agropecuario de Chihuahua.

 

"Estamos dispuestos a dar 100 hectáreas para la experimentación no como renta sino como apoyo. No significaría una pérdida económica, es una inversión", comentó.

 

Jorge Luis López, del CNA Tamaulipas, agregó que se tienen otras 300 hectáreas del Patronato de investigación del estado.

 

Y Felipe Campuzano, presidente de la Fundación Produce de Durango, detalló que están en condiciones de ofrecer 50 mil hectáreas, donde hoy siembran avena, trigo y maíz.

 

"Pierdo más con las plagas que si se dejan de percibir ingresos por esas tierras, se trata de una inversión para encontrar una mejor alternativa", comentó.