Indicadores compuestos confirman la debilidad de la economía (El Financiero 08/06/09)

Arturo Robles

Lunes, 8 de junio de 2009

El Índice Coincidente acumuló 11 meses en contracción.

Reportó su nivel más bajo, desde noviembre de 2003.

Desplome en el primer trimestre de 10.9 %; se agudiza la recesión.

· Se acentúa la debilidad económica

La debilidad económica que enfrenta el país superó ya la ocurrida a principios del siglo XXI y hasta marzo acumuló 11 meses con pérdidas, ocasionando una caída anual promedio de 4.9 por ciento.

Así, el Índice Coincidente, que forma parte de los indicadores compuestos que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en marzo se ubicó en 99.2 puntos, su nivel más bajo desde noviembre de 2003, y una reducción porcentual anual de 11.6 por ciento, su mayor pérdida desde mayo del año pasado.

Esto obedece a los decrementos que tuvieron las variables de los indicadores de la actividad industrial, de la actividad económica mensual y del número de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

La lectura de este índice, que refleja un comportamiento similar al de los ciclos de la economía en su conjunto, muestra que el impacto de la recesión económica global se intensificó en enero-marzo, sumando una pérdida anual de 10.9 por ciento, la más severa desde el desplome de 14.2 por ciento del cuarto trimestre de 1995.

El Índice Adelantado, que determina la posible trayectoria de la economía, se ubicó en 105.7 puntos, 12.8 por ciento inferior al de marzo de 2008.

La contracción anual de este indicador en el mes de referencia determina que la economía está en pleno descenso, con una trayectoria de mayor inclinación.

Según los resultados anuales, el indicador inició la cuesta en septiembre del año pasado, sumando en estos siete meses un decremento promedio anual de 8.5 por ciento, que supera la pérdida promedio de 1.8 por ciento a principios de siglo.

La baja del indicador anticipa un deterioro económico con un fuerte impacto, quizá mayor al de la recesión de mediados de los noventa.

En esos años, la trayectoria negativa duró 14 meses, con una pérdida promedio anual de 15.3 por ciento, lo cual indica que con la mitad de meses el comportamiento negativo es más intenso que el observado en aquellos años.

Manufacturas

La debilidad que presenta el indicador obedece al desempeño desfavorable del índice de horas trabajadas en el sector manufacturero y del índice de volumen físico de la producción de la construcción.

Esta situación se agudiza ante los malos resultados que ambos subsectores tuvieron en el primer trimestre.

Durante ese periodo, las manufacturas tuvieron una contracción anual de 13.8 por ciento, y la construcción cayó 7.7 por ciento, llevando al sector secundario a una pérdida anual de 9.9 por ciento, la mayor baja para las actividades fabriles desde la crisis de 1994-1995, además de que sumaron tres trimestres consecutivos con retrocesos.

Con respecto al comportamiento que tuvieron los indicadores frente al mes previo, la información establece una baja de 1.2 por ciento en el coincidente, y de 0.2 en el adelantado.

Para el primero se observó una disminución desde agosto de 2008, siendo entre noviembre y enero cuando se dieron los resultados mensuales más adversos, mientras que el adelantado tuvo su mayor pesimismo entre septiembre y diciembre del año anterior.